Hay argumentos que hacen inviable la presa El Zapotillo: Semarnat
TEMACAPULÍN, Jal. (apro).- De visita en esta ciudad para conocer de viva voz las posibles afectaciones por la construcción de la presa El Zapotillo, el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Manuel Toledo, señaló que hay argumentos que apuntan a la inviabilidad del proyecto.
“El acto más irracional que yo pudiera registrar es que este pueblo desapareciera”, soltó en la plaza principal.
Además, mencionó que el acuerdo para impulsar la obra, firmado entre los gobernadores de Jalisco y Guanajuato, Enrique Alfaro y Diego Sinhue, respectivamente, tendría que ser ratificado.
“Es un acuerdo más, ha habido más acuerdos en 15 años y es uno más y tiene que pasar por ratificación”, recalcó.
Sobre el plan de gestión integral del agua, propuesto por los habitantes, les pidió que demuestren con elementos técnicos y científicos que es viable, para que el presidente Andrés López Obrador decida si El Zapotillo se cancela.
“Necesitamos proyectos técnicos, argumentos morales, históricos, culturales, necesitamos plantearle el panorama los más completo posible con mayores detalles para que él (presidente) tome una decisión (sobre la presa). Todo apunta a que hay una multitud de argumentos que muestran la inviabilidad del proyecto”, soltó frente a unos 200 asistentes.
Posteriormente, en entrevista con medios, Toledo reveló que anoche se reunió con el gobernador Enrique Alfaro, quien le aseguró que en Guadalajara hay un millón de personas que carecen de agua y se surten mediante pipas.
Por su parte, el secretario de Medio Ambiente local, Sergio Graff, le informó que la capital jalisciense sólo se abastece de dos fuentes, el lago de Chapala, que está contaminado, y pozos que están al límite de su capacidad.
Por lo tanto, subrayó, se está ante una "encrucijada" y se requiere escuchar al millón que no tiene agua.
Durante el encuentro, representantes de los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo recordaron que llevan 14 años de oponerse al proyecto y no van a ceder en su lucha, porque ven a El Zapotillo como un negocio del gobierno.
La presidenta del Comité Salvemos Temaca, Acasico y Palmarejo, Abigail Agredano, pidió a Toledo desmantelar la presa porque, recalcó, es un proyecto "corrupto, inviable y de muerte".
En tanto, Paloma Macías, de la organización Alianza Cívica para la Defensa y Derechos del Agua, solicitó al secretario federal una cita con el presidente para hablar sobre las afectaciones a los más de 4 mil pequeños productores de alimentos que representa.
A su vez, académicos de la Universidad de Guadalajara y del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) entregaron estudios donde se demuestra la inviabilidad de la presa, dado que el Río Verde no cuenta con suficiente agua.
El representante del Observatorio Ciudadano para la Gestión Integral del Agua, Juan Guillermo Márquez, se quejó de que únicamente los municipios acatan sus recomendaciones, pero el estado debe hacer lo mismo porque "son vinculantes".
En su oportunidad, el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Alfonso Hernández Barrón, sostuvo que ha emitido dos recomendaciones sobre el proyecto, pero la autoridad no las ha cumplido por completo.
Del norte de Guanajuato acudió María Luz Villafuerte, representante de la Comunidad Unida por la Vida y el Agua Pastoral Social, quien denunció que, desde hace 20 años, siete municipios de la zona no tienen agua suficiente, y la que existe está contaminada con arsénico y mercurio.
Y ahora su preocupación es que las industrias asentadas en el lugar quieran privarlos del agua de lluvia "que cosechan" de sus techos, abundó.
La obra de la presa El Zapotillo está detenida por los litigios que presentaron habitantes de Palmarejo, Temacapulín y Acasico, quienes aseguran que, si la cortina rebasa los 80 metros de altura, se inundarán. Y la cortina tiene que ser de 105 metros para que la presa funcione.