CHILPANCINGO, Gro. (apro).- Habitantes del poblado de Petatlán marcharon por las principales calles para lanzar un grito de auxilio al gobierno federal ante la situación de violencia que se vive en esta zona de la Costa Grande de la entidad.
Los manifestantes denunciaron que, mientras en la parte serrana se registran enfrentamientos entre grupos armados y masacres, en la parte baja se han disparado los secuestros.
Los inconformes reprocharon que las autoridades de los tres niveles y el Ejército mantienen una actitud de inacción ante la situación.
Mencionaron que el pasado sábado 13 fue secuestrado un excomandante de la Policía Federal, identificado como Daniel Duarte Aguilar, junto a dos mujeres y dos jóvenes, cuando pasaron por el retén de la policía comunitaria que se ubica sobre la carretera federal Acapulco Zihuatanejo, a la altura del poblado de Santa Rosa, municipio de Petatlán.
Una de las víctimas logró escapar y denunció el hecho ante autoridades ministeriales, pero a la fecha, Duarte Aguilar y las otras tres personas siguen desaparecidas, afirmaron los manifestantes.
También señalaron el caso del hijo de la regidora Zulma Arellano Olivar y del dirigente de Morena en ese municipio, Rosendo Pérez Sánchez, quien fue secuestrado hace un mes en Petatlán y ayer lo liberaron en el Estado de México, donde detuvieron a tres militares en activo, acusados del plagio del menor.
Portando cartulinas con mensajes contra el gobierno de Héctor Astudillo, los manifestantes exigieron seguridad, paz y garantías para transitar libremente.
La imparable violencia
En diciembre pasado, la agencia Apro publicó el reportaje La historia del conflicto armado en Petatlán y los exlugartenientes de Rogaciano Alba, donde se indica que hace cinco años, los líderes de los grupos delictivos de Tecpan y Petatlán, identificados como Salvador Chava Granados, Edilberto El Gavilán Bravo Barragán y Crescenciano El Chano Arreola Salto pactaron una tregua para expulsar a Los Caballeros Templarios de la región de la Costa Grande con el apoyo del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), y la intervención de un personaje presuntamente vinculado a la política identificado sólo como “El señor Guerrero”.
Esta alianza criminal se fracturó el año pasado tras la detención en 2016 de El Gavilán, líder del grupo criminal denominado Guardia Guerrerensey los enfrentamientos armados protagonizados por exlugartenientes de Rogaciano Alba Álvarez -exalcalde priista de Petatlán, compadre del exgobernador Rubén Figueroa Alcocer y preso por narcotráfico desde 2010– se intensificaron en la sierra, así como las peticiones de auxilio de pobladores desplazados por la violencia.
Incluso, reportes oficiales confirman que la franja de la Costa Grande de Guerrero es utilizada como zona de arribo de cargamentos de cocaína procedentes de Sudamérica, a pesar de la presencia militar en los municipios de Tecpan, Petatlán, Zihuatanejo y La Unión, donde se construye la ampliación del puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, puerta de entrada de precursores químicos procedentes de Asia que utilizan los grupos delictivos para elaborar droga sintética.
En noviembre, la Marina incautó una lancha cargada con 800 kilos de cocaína frente a la playa de El Calvario, localizada en el municipio de Petatlán, epicentro de la violencia que se ha desatado en los últimos días.
El Chano Arreola es acusado públicamente de liderar la autodefensa que se hace llamar Policía Ciudadana de la Sierra y la Costa Grande de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) para asumir el control del trasiego de cocaína y la producción de droga sintética en la sierra de Petatlán, así como desplazar al sucesor de El Gavilán, identificado como Oliver El Ruso Coria Sánchez y afincado en la cabecera de ese municipio.
Mientras en el municipio vecino de Tecpan, el bastión de El Chava Granados, reapareció después de seis años una guardia civil armada vinculada con el narco durante el mandato del exgobernador Ángel Aguirre Rivero.
Sus dirigentes advirtieron que no van a permitir la expansión de la autodefensa de El ChanoArreola porque pactó una alianza con Johny El Pescado Hurtado Olascoaga, líder del grupo delictivo La Familia y afincado en Arcelia donde controla la explotación minera que tiene salida al extranjero desde el puerto de Lázaro Cárdenas.