PUEBLA, Pue. (apro).- La discrepancia entre las horas de muerte que consignan las actas de defunción de las tres personas que viajaban en el helicóptero en el que fallecieron la gobernadora Martha Erika Alonso y el senador Rafael Moreno Valle, abona a las dudas sobre si se practicaron necropsias a las víctimas del fatal percance del 24 de diciembre de 2018.
Como ocurre en los casos de Alonso Hidalgo y Moreno Valle, las actas de defunción de los pilotos de Roberto Coppe Obregón y Marco Antonio Tavera Romero, así como del asistente del senador, Héctor Baltazar Mendoza, registran distintas horas de muerte y aún con un desajuste mayor con respecto a la hora en la que ocurrió la caída del helicóptero.
Tramitadas en el Registro Civil del Estado, el documento que corresponde al piloto Coppe Obregón, inscrito en el Juzgado 1, Libro 6 de 2018, con el número 1,002, asienta que dejó de existir a las 18:20 horas del 24 de diciembre de 2018.
El acta de defunción del copiloto Tavera Romero, igual del juzgado 1, Libro 6, número 1015, registra hora de muerte a las 19.27 horas; mientras que el documento de Baltazar Mendoza, asentado en el Libro 5, con el número 00984, marca las 18:34 horas.
Ya en septiembre se publicó que las actas de defunción de Moreno Valle y Alonso Hidalgo indican que ambos murieron a las 17:25 horas, cuando el registro de las comunicaciones que tuvieron la torre de control y la tripulación de la nave deja en claro que la caída del helicóptero ocurrió entre las 14:35 y las 14:39 horas de ese 24 de diciembre.
El abogado Alberto Peralta Merino, quien ha seguido el caso por la presunta desaparición de pruebas que constituiría la cremación de las víctimas de este percance, señala que, a un año de los hechos, se suman más inconsistencias y dudas sobre las investigaciones y diligencias que se han hecho para esclarecer estos hechos.
Al ser cuestionado en octubre sobre esta contradicción, el secretario general de gobierno, Fernando Manzanilla Prieto, quien además es cuñado de Moreno Valle, consideró que la hora que aparecía en las actas estaba desfasada de los hechos porque podría corresponder al momento en el cual el Ministerio Público llevó a cabo el levantamiento de los cuerpos.
Peralta Merino coincidió en que esta diferencia en las horas de muerte de los dos tripulantes y los tres pasajeros, sí podría corresponder a la hora en la que se realizó el protocolo del levantamiento de los cadáveres.
Sin embargo, señaló que esto abona a las sospechas que han prevalecido desde los primeros días de los acontecimientos en torno a si se dispensaron las autopsias de Moreno Valle y Alonso Hidalgo. O en todo caso, agregó, pone en duda la seriedad con la cual se llevaron a cabo esos estudios que son de relevancia en cualquier investigación.
Peralta Merino advirtió que la hora de la muerte no la puede establecer el ministerio público, sino que es el médico forense quien debe determinar ese dato en base a las necropsias que realice a cada uno de los cuerpos y que tendrían que tener, al menos, mayor congruencia con relación a la hora en que ocurrió el percance.
El hecho de que cada uno registre distintas horas de muerte, legalmente expone que las víctimas no murieron en un mismo accidente, indicó el litigante.
Agregó que esta irregularidad se sumaría al hecho que los cinco cuerpos fueron cremados cuando apenas habían transcurrido unas horas de la caída del helicóptero, con lo cual no se podrían ahondar investigaciones.
El 1 de octubre, el periodista Ciro Gómez Leyva aseguró en sus redes sociales tener información de que el entonces secretario general de gobierno, Jesús Rodríguez Almeida se comunicó el día del percance con los familiares de Moreno Valle y de Alonso Hidalgo para ofrecerles si querían que se dispensara la autopsia, cosa que los parientes rechazaron.
Aunque, sostiene que los familiares sí aceptaron el ofrecimiento sobre la cremación de los cuerpos, que igual habría ofrecido el entonces funcionario estatal. Cabe señalar que en ese momento, Rodríguez Almeida no desmintió esta información.
Este lunes, en la víspera del primer aniversario, Javier Jiménez Espriú, secretario de Comunicaciones y Transportes, señaló que el informe final de las causas de la caída del helicóptero aún no está listo, pero adelantó que quedó descartado que se debió a un atentado.
En noviembre, al acudir a comparecer ante el Congreso de la Unión, el secretario reconoció que el gobierno federal no ha tenido acceso a las necropsias que habría practicado la Fiscalía General de Puebla.
“¿Qué pasó con los cuerpos, la necropsia?, esto es una cuestión que no nos compete a nosotros”, dijo.
Caob