ROMERILLO, Chamula, Chis. (apro).- Año con año, en esta comunidad de los Altos de Chiapas, indígenas tsotsiles de unas 22 comunidades y parajes acuden al panteón para festejar a su muertos, pero donde la Coca Cola representa un elemento esencial sobre las tumbas.
Desde muy temprano hombres, mujeres y niños se concentran en esta que es la feria más importante del municipio más grande de las más 100 comunidades de San Juan Chamula, que anualmente recibe el recorrido del presidente municipal y su comitiva.
También, turistas locales, nacionales y extranjeros llegan a esta comunidad ubicada a pocos kilómetros de San Cristóbal de Las Casas, rumbo a Tenejapa, un poco más delante de Cruztón, la meca del posh, una bebida tradicional embriagante.
[caption id="attachment_605631" align="alignnone" width="1024"] Chiapas es el principal consumidor del refresco Foto: Isaín Mandujano[/caption]
Junto al panteón que es ya el centro de la población, se erige esta gran feria con juegos mecánicos, puestos de comida, ropa, golosinas y bebidas como posh, cerveza, y jugo de caña fermentada o “Chicha”.
Entre los grupos norteños y el mariachi que cantan de tumba en tumba, sobresale la presencia de danzantes, los kolemal max, o los monos sueltos, en castellano. Con sus instrumentos de vientos, el acordeón, la guitarra artesanal echa en esta región, las trompetas y las sonajas, los personajes coloridos bailan alrededor de las tumbas y consumen las bebidas que les ofrecen, entre ellas cerveza y posh. Algunos de ellos caen alcoholizados mientras continúa la festividad.
[caption id="attachment_605630" align="alignnone" width="1024"] La música y el baile rompen la solemnidad en esta fiesta. Foto: Isaín Mandujano[/caption]
Destaca un grupo de pequeños danzantes a cargo de Pedro Hernández Gómez, originarios del lugar, y quienes buscan preservar la tradición de este pueblo indígena tsotsil de los Altos de Chiapas.
Pedro es un joven discapacitado al que los propios niños le ayudan a caminar con sus muletas cargando su acordeón. Con rastas y ropa deportiva, Pedro se afana con que los niños ejecuten cada instrumento y dancen al compás de la música de viento.
Sobre las tumbas llenas de juncia (hojas de pino), cempasúchil, velas, también destacan las cervezas y tamales. Muchos pobladores también ofrendan Coca Cola, misma que ponen junto a la cruz después de derramar un poco sobre la tumba cubierta con una tabla.
Un estudio del Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur (CIMSUR) reporta que el estado es la mayor región consumidora de la popular bebida a nivel mundial, un promedio de 821.25 litros al año por persona.
Jaime Page Pliego, doctor en antropología por el CIMSUR, reveló en su estudio que el aumento del consumo de Coca Cola fue causado por una modificación de la vida social y religiosa de sus habitantes. Y en Romerillo, esto es la prueba más palpable.
En este panteón no se permiten tumbas de concreto, nada de cemento, dicen, nada de ladrillos, al morir, todos son iguales en este panteón.
El panteón está ubicado en una colina, donde se erigen 22 cruces, gigantescas, es una por cada uno de los parajes y comunidades que tiene derecho a enterrar en este lugar a sus muertos.
En Romerillo este fin de semana es una larga fiesta, grupos musicales amenizan las noches, los pleitos nunca faltan, pero los mayoles o policías están prestos para llevarse a los rijosos a la cárcel de la comunidad donde pasarán una noche fría.
En esta comunidad, a 2 mil 500 metros sobre el nivel del mar, el alcohol, es lo que más sobra. Sus vecinos del pueblo indígena de Cruztón,son ampliamente conocidos por la elaboración del posh. Desde muchas comunidades, muchos municipios y de otros estados del país, llegan a este lugar donde la mayoría de sus habitantes elabora posh a base de trigo, panela y azúcar. Otros usan como elemento básico el maíz.
Ahora también elaboran destilados de sabores para bajar la intensidad del alcohol.
Román, un joven que atiende su poshería en el centro de Cruztón, refiere que vienen personas desde muy lejos para comprar hasta por tambos el posh que produce su familia. Añade que sus vecinos de Romerillo son sus principales clientes en estas festividades, a donde los de Cruztón también tienen sus muertos.
[caption id="attachment_605629" align="alignnone" width="1024"] El posh tiene gran arraigo en la zona. Foto: Isaín Mandujano[/caption]
El sincretismo prehispánico, el cristianismo y nuevos elementos modernos, hacen que los usos y costumbres, así como las tradiciones se conserven en Romerillo, hasta donde miles llegan para ver a sus muertos, pero también para celebrar la vida en familia.