CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En pleno juego de beisbol amateur, el lanzador José Francisco Herrera Favela murió en la loma de pitcheo al ser víctima de una bala perdida, proveniente de una balacera que ocurría a más de un kilómetro de distancia, en Reynosa Tamaulipas.
El inusual suceso fue confirmado por personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado que acudió al campo de beisbol a dar fe de los hechos, ocurridos alrededor de las 18:30 horas del miércoles, cuando jugaban un partido amistoso beisbolistas de la Colonia Constitución, al noroeste de la ciudad.
La balacera ocurría en la carretera ribereña, por la Colonia Rancho Grande, por lo que la bala viajó poco más de un kilómetro, cruzó la Avenida Central y unas vías de ferrocarril para caer en el campo, exactamente en la cabeza del pitcher.
Según comentaron compañeros de la víctima, escucharon los balazos y todos se tiraron al suelo para esperar que pasara el tiroteo, pero cuando se levantaron se dieron cuenta que José estaba tirado inerte en la loma de pitcheo con el guante en la mano.
Tras acercarse a ver qué le pasaba, quedaron sorprendidos de verle sangre en la cabeza con exposición de masa encefálica. Llamaron a la Cruz Roja, pero los paramédicos al llegar lo declararon muerto.
Al lugar arribó personal de Servicios Periciales y del Ejército Mexicano.
Los aficionados que veían el juego corrieron a avisarle a sus familiares. José vivía en la calle Héroes de Nacozari número 135, de la Colonia Módulo 2000 de Rancho Grande, por lo que la madre llegó rápido sólo para ver a su hijo tendido en la loma de pitcheo sobre un charco de sangre.
Este hecho se registró de forma paralela al operativo de las 18:00 horas de ayer, en el que elementos de la Marina dispararon desde dos helicópteros hacia camionetas con presuntos hombres armados en la misma ciudad fronteriza.