CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Con cuatro días de anticipación, el gobierno de la Ciudad de México comenzó a blindar el Centro Histórico a fin de evitar que las colectivas feministas que se manifestarán el próximo lunes con motivo del Dia Internacional de la Mujer dañen monumentos y edificaciones catalogadas, como ha ocurrido en anteriores ocasiones.

Desde los primeros minutos de este jueves, trabajadores del gobierno de la ciudad comenzaron a resguardar con vallas metálicas las áreas circundantes al Palacio de Bellas Artes, uno de los inmuebles históricos más emblemáticos de la capital del país.

En las horas próximas se hará lo mismo con otros edificios y monumentos que se encuentran sobre las avenidas Paseo de la Reforma, Juárez y las calles aledañas a la plancha de la Constitución, hasta donde llegará la marcha feminista.

Se espera que también se protejan fachadas de hoteles y comercios que generalmente son blanco de ataques y saqueos en las movilizaciones.

A pesar de la pandemia, el año pasado se congregaron cerca de 80 mil mujeres y en esta ocasión no se esperan menos, después de que las propias autoridades capitalinas reconocen que el confinamiento ha provocado un notable incremento de la violencia contra las mujeres, así como los constantes roces que éstas han sostenido con el presidente Andrés Manuel López Obrador.