CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Luego de dos años y cinco meses de litigios y audiencias, este viernes un tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México declaró culpable a Jorge Luis González Hernández por el delito de feminicidio agravado cometido contra su expareja, Lesvy Berlín Rivera Osorio. "Por unanimidad este tribunal emite el fallo condenatorio contra Jorge Luis González Hernández por el delito de feminicidio cometido contra Lesvy Berlín Rivera Osorio", señaló Octavio Israel Reyes, juez relator del caso. Antes de dar a conocer su decisión, el tribunal integrado por José Juan Pérez Soto, Octavio Reyes y Adolfo Rodríguez, reconoció el clima de violencia contra las mujeres que se vive en el país y explicó que su decisión había sido tomada con perspectiva de género y atendiendo a la sentencia del caso González y otras, mejor conocido como campo algodonero. Con ello, el ambiente de incertidumbre y desconfianza que se respiraba en la Sala 1 del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJ-CDMX) empezó a disiparse. Después, los jueces enlistaron cada una de los testimonios vertidos en 11 días de audiencia, en las que se daba cuenta de la relación que existía entre Jorge Luis y Lesvy, así como la violencia de género ejercida contra la joven de 22 años y que el 3 de mayo de 2017 culminó con su asesinato en inmediaciones de Ciudad Universitaria. Asimismo, descartaron el presunto suicidio de la mujer y aseguraron que la actitud de Jorge Luis, de 31 años, no correspondía a la de un joven afectado por desamor, sino a la de alguien que había cometido un delito y buscaba no ser imputado. El control que Jorge Luis ejercía sobre Lesvy, afirmaron, hace inverosímil que la hubiera dejado sola la madrugada del 3 de mayo en compañía se sujetos desconocidos. "Ha quedado establecido que se privó de la vida a Lesvy", afirmó uno de los jueces. Araceli Osorio, la madre de Lesvy, comenzó a llorar, al igual que el público presente en la audiencia. Jorge Luis, quien vestía una chamarra de color café, mantuvo la mirada clavada al escritorio como lo hizo durante las cinco horas de audiencia. Tras escuchar el fallo, Araceli Osorio agradeció al tribunal: "Este fallo es un ejemplo de justicia no sólo para Lesvy, sino para todas las mujeres que nos han sido arrebatadas", expresó aún con la voz entrecortada. Mientras la sala era desalojada, un familiar de la víctima lanzó al agresor: ¡púdrete, Jorge Luis”. Al salir de la audiencia, la familia de Lesvy fue recibida con la bandera que encabezó su lucha por dos años y cinco meses: "No fue suicidio, fue feminicidio" y "ni una más, ni una más. Ni una asesinada más". Frente a los medios de comunicación y el grupo de acompañamiento que resistió afuera del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, las tres semanas del juicio, Araceli Osorio reconoció que el fallo tuvo que ver con la presión que ejercieron en las calles, en la prensa y ahí mismo. "Desde nuestro coraje, nuestra rabia, nuestro dolor hablar por ellas, darles voz. Hoy empieza el camino hacia la justicia en el caso de Lesvy ¿Cuánto tiempo tenemos que esperar para que esa justicia se haga pronta y expedita para todas las mujeres que fueron asesinadas, que siguen siendo asesinadas en el país?" Remarcó que el poder judicial tiene una gran deuda y advirtió a las autoridades que tiene argumentos válidos, fuertes y verdaderos, para que los crímenes contra las mujeres sean sancionados y eso, “señor Andrés Manuel López Obrador, no es venganza, es justicia". Por su parte, las abogadas Ana Yeli Pérez Garrido y Sayuri Herrera afirmaron que el caso de Lesvy sienta un precedente histórico, por lo menos en el fallo, puesto que los jueces dieron una serie de razonamientos apegados a lo que ellas sostuvieron en el juicio y esperan que se siga ese estándar y se visibilicen las medidas de no repetición. "El caso de Lesvy fue muy complejo, tuvimos que luchar contra el sistema de justicia para poder estar aquí a que nos escucharán, ha sido una batalla de muchas personas, de muchos profesionistas y aquí no se vino a construir una verdad, sino a sostener de manera científica", aseguró Ana Yeli Pérez. Previo al fallo, las partes presentaron sus alegatos finales, en ellos el ministerio público y la defensa de la familia de Lesvy hicieron alusión a los videos en los que se registran los últimos minutos de vida de la joven y donde se observa que es agredida físicamente por su expareja en al menos tres ocasiones. Además, dieron cuenta de la violencia que Jorge Luis ejercía contra la joven, quien la golpeaba, la maltrataba, intervenía sus redes sociales, espiaba sus conversaciones e incluso limitaba su movilidad, ya que no le permitía tener llaves de la vivienda que compartían. Por su parte, la defensa de Jorge Luis acusó a las abogadas de Lesvy de "malinchistas" por traer peritos extranjeros y no confiar en las instituciones mexicanas, en referencia al testimonio del perito guatemalteco José Mario Nájera Ochoa, quien determinó que Lesvy no se había suicidado. Además, los abogados apelaron a que los medios de comunicación difundieron información sugestiva de culpabilidad, estigmatizado a su representado Jorge Luis González Hernández y violando su presunción de inocencia. Al reclamo se unió el imputado, quien pidió a los jueces juzgarlo con objetividad. “Los medios ya me condenaron, la tele, el internet ya me condenaron. les pido que sean objetivos (sic)”, expresó el extrabajador de la UNAM. En respuesta, Araceli Osorio manifestó: “A quien se le violó su presunción de inocencia fue a Lesvy, asesinada sin voz”. Aunque la sentencia que deberá cumplir Jorge Luis Gonzáles se dará a conocer hasta concluidas las audiencias por reparación del daño moral a la familia de Lesvy, es un hecho que el declarado feminicida deberá permanecer de 30 a 60 años en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente.