'Nómina 8” de Mancera mermó ingresos de trabajadoras del Inmujeres-DF
MÉXICO, DF (apro-cimac).- Trabajadoras del Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF) afirmaron que el Programa de Estabilidad Laboral, conocido como “Nómina 8” –aplicado desde enero pasado como parte de una política de apoyo a empleados del gobierno capitalino–, sí les trajo beneficios aunque la pretendida estabilidad “sólo está en el discurso”.
Por ello, la semana pasada más de 40 empleadas tomaron simbólicamente las instalaciones del instituto para denunciar que dicho programa perjudicó sus ingresos. Agregaron que en octubre pasado las obligaron a firmar un recibo por un retroactivo que no han podido cobrar.
Dos inconformes, quienes pidieron reservar su nombre por temor a represalias, dijeron que “Nómina 8” no les brinda la estabilidad laboral prometida, pues aunque tienen un contrato anual –no por tres meses, como sucedía antes–, no les asegura la renovación del contrato.
“Nos dicen que tenemos estabilidad laboral por un año, pero eso en realidad no es estabilidad. No generamos antigüedad, no tenemos seguridad social, como derecho a pensión o crédito de vivienda. Tenemos acceso a servicios médicos, pero nada más”, comentaron.
Menos salario
Las trabajadoras explicaron que están molestas porque nunca les informaron que serían ingresadas al programa “Nómina 8”, ni que eso implicaría una reducción de su salario.
“En febrero, cuando firmamos los recibos de tres quincenas, nos dijeron que ya no éramos empleadas por honorarios y que nos incorporaban al Programa de Estabilidad Laboral. Cobramos mucho menos de lo que esperábamos, muchas ya contábamos con esos ingresos, por lo que el cambio nos afectó profundamente”, explicaron.
Según sus cuentas, la reducción de sus ingresos fue de 2 mil pesos mensuales en promedio, ya que el programa establece que, para cubrir la prestación de servicios médicos, el trabajador aportará lo equivalente a 3.7% y los órganos de administración pública, 8.8%, ambos del salario base de cotización.
Por esta razón, estas servidoras públicas que hacen trabajo de campo en prevención del Cáncer de Mama (CaMa) o labores administrativas, comenzaron a manifestar su inconformidad con las autoridades y a buscar una respuesta.
Las entrevistadas reconocieron la disposición de Teresa Incháustegui Romero, directora del Inmujeres-DF, para mantener conversaciones con ella y por interceder ante las autoridades del GDF para pedir una renivelación de puestos para que mejoren sus ingresos.
El origen del problema
La situación que llevó a estas trabajadoras a hacer un cierre simbólico de las instalaciones del Inmujeres-DF se originó en julio pasado, cuando les informaron que se haría una retabulación de puestos y en octubre recibirían un pago retroactivo que cubriría los meses de julio, agosto y septiembre.
“En octubre nos hicieron firmar el recibo por el retroactivo, pero nunca nos depositaron el dinero y nos explicaron que no podíamos acceder a ese pago por ‘cuestiones administrativas’, sin explicarnos por qué (la Secretaría de) Finanzas emite recibos sin tener dinero para pagar”.
De acuerdo con las empleadas, Miguel Ángel Vázquez, director general de Administración y Desarrollo de Personal, empeñó su palabra para que el pago retroactivo se realizara en octubre pasado. Y lo cumplió, pero les depositaron el pago sin el incremento y no les dieron recibos.
En entrevista con apro-cimac, Teresa Incháustegui Romero informa que no fue posible renivelar en julio, pues debían esperar a que el oficial mayor del DF emitiera una circular para informar sobre retabulaciones. Eso ocurrió apenas en noviembre pasado, afirma, por lo que no es posible cobrar un retroactivo que cubra el faltante de su sueldo de julio a octubre “ya que la retabulación ocurrió hasta el mes pasado”.
Tras la toma de las instalaciones, las trabajadoras pudieron reunirse con Francisco Acevedo García, subsecretario de Programas Delegacionales, quien les dijo que aunque tengan un recibo, el pago del retroactivo no puede ser efectivo. Y les advirtió que “las puertas del Inmujeres-DF estaban abiertas”, si no les parecía lo que ahora perciben.