CULIACÁN, Sin. (apro).- El gobernador Rubén Rocha Moya solicitó al Congreso de Sinaloa la aprobación de un crédito por 2 mil 300 millones de pesos, como lo estableció la mesa de negociación para la reactivación económica del estado. 

La reunión se da en medio de la batalla entre facciones rivales del crimen organizado que se ha extendido ya cinco meses y ha dejado más de 700 homicidios, así como pérdidas económicas por más de 5 mil millones de pesos.   

La reunión celebrada en el Salón Constituyentes del Congreso fue encabezada por el mismo gobernador, en atención a la reunión de trabajo a la que nombraron “plan de reactivación económica”. 

Esto sucede bajo el contexto del más reciente informe del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que coloca a Sinaloa con un déficit del -0.4 por ciento de creación de empleos. 

También por el cierre masivo de comercios, sobre todo en Culiacán, donde se ha visto que negocios de diversos giros, desde el restaurantero hasta el de servicios, han bajado sus cortinas. 

El crédito, de acuerdo con lo señalado por el gobernador Rocha, se debe a un adeudo con el SAT heredado de la administración de Quirino Ordaz Coppel, nombrado embajador en España durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. 

“La iniciativa que les voy a entregar ahora es solicitándoles un crédito por 2 mil 300 millones de pesos, que es exactamente los 2 mil 300 millones de pesos que hay que pagarle al SAT y a Hacienda, y no podemos pagar deuda con recursos de largo plazo. Vamos a invertirlo todo en obra pública y se las doy más o menos como lo estamos considerando”, explicó.   

El plan, dijo, contempla la ejecución de más de 29 obras en los 20 municipios que conforman Sinaloa. Además de obra pública, estos recursos estarán destinados a programas sociales y sectores que requieren apoyo para reactivar la economía, dijo.