CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Las condiciones están puestas para que, por formato y temas, el tercer y último debate entre quienes aspiran a la Presidencia de la República sea el más intenso en el cruce de señalamientos de la oferta opositora y la del partido gobernante.

La oferta es de contraste: una revisión de los temas en la propuesta de Xóchitl Gálvez materializa la oposición a las políticas vigentes, cuestionadas a través del sexenio de Andrés Manuel López Obrador en prácticamente todos los asuntos que, por su parte, la candidata Claudia Sheinbaum plantea continuar como “un segundo piso” de la “Cuarta Transformación”.

El Centro Cultural Tlatelolco, de la Ciudad de México, será la sede del intercambio entre la candidata de la coalición “Sigamos Haciendo Historia” (Morena-PT-PVEM), Claudia Sheinbaum Pardo; de la coalición “Fuerza y Corazón por México” (PAN-PRI-PRD), Xóchitl Gálvez Ruiz, y del abanderado de Movimiento Ciudadano (MC), Jorge Álvarez Máynez.

Con el precedente de una Xóchitl Gálvez mejor plantada en el segundo debate que en el primero y la radicalización del discurso tanto de ella como de los líderes de la coalición que la postula, la expectativa es que los cuestionamientos se lleguen a centrar en las políticas del gobierno lopezobradorista y que han formado parte del discurso opositor, por lo que Sheinbaum será sometida a defender lo actual y presentar su oferta de futuro.

Las preguntas serán realizadas por cada candidatura, un primer aspecto novedoso en el formato, aunque se realizará por mediación de los moderadores, que será respondida por las tres candidaturas con un minuto de réplica adicional.

Pero además del formato, los temas son precisamente algunos de los que han resultado en críticas severas de la oposición al gobierno de la llamada “Cuarta Transformación”, empezando por la política social, siguiendo con inseguridad y crimen organizado, luego migración y relaciones exteriores y, finalmente, pluralismo y división de poderes.

Por los antecedentes de las críticas opositoras y las ofertas de campaña, es posible prever cuál será el rumbo en los diferentes ejes temáticos del tercer debate.

La continuidad de Xóchitl

La política social del gobierno actual se ha concentrado en el reparto de ayudas económicas a personas de la tercera edad (Pensión del Bienestar), a los jóvenes (Construyendo el Futuro, personas con discapacidad y Becas Benito Juárez) y campesinos (precios de garantía mediante Segalmex, y para los del sureste, Sembrando Vida).

Hasta ahora, Xóchitl Gálvez ha mantenido la idea de no eliminar los programas del Bienestar sino “ampliarlos”, y para hacerlo propone crear una aplicación llamada “Apúntate”, en la que los ciudadanos pueden elegir el tipo de apoyo social que necesitan. Básicamente se trata de un mecanismo de precisión en la oferta de apoyos. En síntesis, dar continuidad pero con mayor nivel de sectorización de los beneficiarios.

El éxito de los Programas del Bienestar ha sido un problema para los dirigentes de los partidos de oposición, señaladamente para el PAN, cuyo líder nacional, Marko Cortés Mendoza, ha pasado el sexenio entre la afirmación de que los apoyos para adultos mayores iniciaron con el PAN a cuestionar su uso electoral o señalar desvíos de recursos, pero pocas veces se ha referido a su eliminación.

Seguridad y crimen organizado

Donde la crítica se ha centrado es en la política de seguridad, particularmente mediante el empleo de la frase “Abrazos no balazos”, pronunciada por el presidente López Obrador.

El mandatario ha mantenido la idea desde sus primeras campañas de “atacar las causas de la criminalidad”, generando oportunidades para los jóvenes en lugar de una política coercitiva y haciendo llamados, sobre todo los primeros años del sexenio, a que todos se porten bien.

El crimen, según el presidente, en realidad está en las altas esferas, por lo que solía emplear la expresión “barrer las escaleras de arriba hacia abajo” y en generar las condiciones de seguridad con la creación de la Guardia Nacional, integrada principalmente por militares.

Tema constante en toda la campaña de Xóchitl Gálvez, habida cuenta de numerosas críticas de la dirigencia nacional del PAN y a veces de la del PRI en estos años, sobre el modelo de seguridad. De hecho, gran parte de su narrativa se concentra en la palabra “miedo”.

“Por un México sin miedo” es uno de los ejes temáticos de la propuesta de Gálvez Ruiz que, si bien incluye aspectos de desarrollo social, economía y desarrollo, pasa de inmediato al tema de seguridad con 14 propuestas de diferenciación con la política del actual gobierno.

La primera propuesta al respecto expresa: “se acabaron los abrazos a los criminales” y su explicación consiste en usar la toda la fuerza y capacidad del Estado para combatirlos, en una oferta que se relaciona con el punto nueve, que expresa la idea de perseguir y reducir a las organizaciones delictivas más violentas.

En el siguiente punto rechaza el modelo de militarización y propone recuperar el carácter civil de las policías, lo que lleva a un tercer apartado sobre la formación y profesionalización de policías.

El cuarto aspecto cuestiona intrínsecamente la desarticulación entre órdenes de gobierno y propone recuperar la coordinación y el acuerdo, renovando los fondos eliminados por la actual administración para darle presupuesto a estados y municipios a través del Fortaseg y Fortamun.

Además, propone un mando civil para la Guardia Nacional, así como duplicar la cantidad de elementos.

Polémica desde el primer día de campaña, Xóchitl Gálvez fue a Fresnillo y ahí ofreció construir una gran cárcel de máxima seguridad con tecnología de punta y eliminar la sobrepoblación del sistema penitenciario, entre otros aspectos.

Además, propone crear un sistema de justicia cívica para reducir los delitos que generan conflicto social; priorizar los derechos humanos así como la atención de víctimas; ampliar los programas sociales para reconstruir el tejido social; garantizar el ejercicio de la libertad de expresión con el mejor sistema de “protección de periodistas del mundo” y fortalecer la cooperación internacional con agencias, un aspecto este último en el que también se han generado críticas al actual modelo por su ruptura, principalmente, con las agencias estadounidenses.

En cuanto a justicia, Gálvez Ruiz propone capacitar a los funcionarios del sistema de justicia, crear un “ministerio” de Justicia, garantizar la autonomía del Poder Judicial, crear un nuevo mecanismo de elección de ministros de la Suprema Corte, garantizar la autonomía de los organismos autónomos, un consejo de “acompañamiento” a las fiscalías federal y de los estados, así como reformular la prisión preventiva oficiosa.

Migración y política exterior

Las críticas de los partidos que abanderan a Xóchitl Gálvez han sido insistentes en materia de política exterior y migración. En cuanto a lo primero, el sexenio ha transitado con gestos de solidaridad con gobiernos y gobernantes de izquierda de otros países, lo que ha llevado a evitar la participación del presidente López Obrador en cumbres, o a generar fricciones diplomáticas como con los gobiernos de Bolivia, Perú y Ecuador.

Además, la política migratoria ha sido cuestionada por los partidos de oposición debido a la operación de la Guardia Nacional para detener migrantes que, si bien forman parte de un programa de regularización y empleo en México, han saturado los centros migratorios con la conocida tragedia de Ciudad Juárez, el incendio en el que murieron 40 personas migrantes en marzo de 2023.

Con base en su propuesta, Gálvez Ruiz compromete la creación de una nueva Autoridad Fronteriza con una perspectiva de seguridad y derechos humanos para los migrantes; una política exterior que incluye a los tres poderes y ordenes de gobierno; atender las cumbres presidenciales; trabajo multilateral en cooperación para el desarrollo, defensa de la democracia y cambio climático; y sobre las agencias expone:

“Es urgente reforzar el andamiaje institucional y los mecanismos de comunicación y coordinación con las principales agencias de Estados Unidos”.

De hecho, la relación con Estados Unidos es también abordada en relación al T-MEC, así como un replanteamiento con Asia-Pacífico y la Unión Europea, entre otros temas.

Pluralismo y división de poderes

La crítica opositora ha sido abundante en términos de pluralismo. Acaso uno de los reclamos radica en la falta de consensos, el desinterés del presidente por reunirse con las oposiciones y lo que, consideran, una falta de respeto a la autonomía de instituciones y la división de poderes.

El presidente ha sido claro en su punto de vista, en síntesis: la negociación con los partidos de oposición es equiparable a corrupción; el Poder Judicial es corrupto; en el Legislativo no hay posibilidad de acuerdo porque la visión de país es diferente y defiende intereses creados; la autonomía es falaz y corrupta, sólo consume presupuesto y cuida a los poderosos; el Poder Judicial es corrupto y depende de poderes ajenos al interés del pueblo.

Además ha optado por centralizar recursos, recortando presupuestos a los estados y municipios.

La propuesta de Xóchitl Gálvez, enunciada en el apartado “Democracia, libertades y federalismo”, plantea un proceso de reconciliación que ponga fin a la polarización; cambiar de gobierno polarizador a un gobierno de coalición con representación de la sociedad civil; restituir el equilibrio de poderes y los contrapesos; fortalecer el federalismo.

También ciudadanizar acciones de gobierno; aumentar recursos de estados y municipios descentralizando ejercicios; esquemas de gobierno abierto y participación ciudadana, entre otros.

El asunto de la democracia, el pluralismo, las libertades y el federalismo es central en la agenda opositora y también una de las que han generado las movilizaciones de organizaciones de la sociedad civil como la Marea Rosa.

De hecho, hoy domingo 19, antes del debate, Xóchitl Gálvez participará en la marcha de la Marea Rosa, que el gobierno y el presidente López Obrador han señalado de responder a los intereses de la élite económica que encabeza el magnate Claudio X. González y en la que, precisamente, los temas de este último apartado se espera sean los de mayor abordaje por los oradores de la marcha.