CHILPANCINGO, Gro. (apro).- El policía que asesinó al estudiante Yanqui Kothan Gómez rindió su declaración, pero no le fue dictada prisión preventiva por parte de la Fiscalía General del Estado de Guerrero, reveló el Centro de Derechos Humanos de Víctimas de la Violencia, Minerva Bello (Centro Minerva). Además de que se fugó luego de que pidió permiso de ir a comprar a una tienda.

Fuentes de la corporación revelaron que fue al personal de la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero a quienes se les fugó.

Además, el organismo aseguró que fue hasta las 4 de la tarde del martes 12 de marzo, cinco días después del crimen del normalista de Ayotzinaoa, que la fiscalía estatal entregó la carpeta de investigación a la Fiscalía General de la República (FGR).

El jueves pasado a las 19:50 horas, los estudiantes de la Escuela Normal Raúl Isidro Burgos ubicada en Ayotzinapa, a las afueras de Tixtla, Yanqui Kothan, Osiel Faustino y el Arenita, viajaron de la escuela a la capital del estado para ir por tres amigas quienes asistirían al baile de aniversario de la institución.

Los jóvenes que tripulaban una camioneta detuvieron su marcha en la entrada a la ciudad, en el viejo libramiento, para que uno de ellos, el "Arenita", comprara cigarros en una tienda.

En ese momento, policías estatales se les acercaron apuntando con sus armas. Yanqui, el conductor, dio un arrancón para dar la vuelta en U y tratar de retornar a la ciudad de Tixtla. Fue cuando los policías dispararon a las llantas del vehículo y luego contra los dos estudiantes.

Yanqui Kothan, que un día antes participó en la protesta que derribó una puerta en Palacio Nacional, fue herido de muerte en la cabeza por una bala disparada a un metro de distancia, de acuerdo con un dictamen de balística.

Los jóvenes no iban alcoholizados, ni drogados.

Consultada, Norma Garduño, abogada del Centro Minerva, reveló que el viernes 8 de marzo cuando acompañaron al estudiante detenido Osiel Jimón a rendir su declaración ante el Ministerio Público, agentes de la FGE dijeron que ya había sido detenido los tres policías que participaron en los hechos.

“Dijeron 'ya fueron detenidos' y no que se presentaron por su propia voluntad. Nos consta porque miramos que llegaron los elementos que iban a hacer las pruebas. Estábamos en una oficina y los elementos (policías) que habían participado estaban en otra”.

En ese momento, aseguró la abogada, la FGR ya había comunicado que había elementos para declarar que la policía había violado los derechos humanos de los jóvenes.

“Nos llama la atención porque estaba en sus atribuciones de la Fiscalía dictar una medida cautelar de prisión preventiva ante la posibilidad de la comisión de un delito, sin embargo, no lo hace.

Agregó que no es el primer caso donde se libera a un sospechoso y después se emite una orden de aprehensión cuando ya se dio a la fuga.

“Desafortunadamente en las instituciones de Guerrero es normal que sus acciones sean a destiempo, de manera parcial y que no avisen absolutamente nada a las víctimas de un delito”.

En el Centro Minerva, dice, hay una lectura de preocupación porque la misma noche de los hechos, el secretario de seguridad pública Rolando Solano y el secretario general de gobierno, Ludwing Marcial salieron a dar una versión que no pueden sostener.

“Hasta este momento (no tenemos a gente detenida ni órdenes de aprehensión cuando es claro que los agentes participaron en una operación donde además hay un homicidio”.

“Es muy lamentable el papel de la Fiscalía de Guerrero, que lejos de tomarse el tiempo de hacer comunicados deberían de investigar, integrar la carpeta de investigación o hacer lo que la Fgr está solicitando”, expresó la abogada.

En el mismo contexto, el diario El Sur informó que el policía estatal, presunto responsable de haber disparado al estudiante Yanqui Kothan, estaba bajo resguardo del grupo Centauro de la Secretaría de Seguridad Pública en el Cuartel General de la Policía estatal, ubicada al norte de Chilpancingo.

Versiones de la misma corporación dieron a conocer que el agente se fugó la tarde del lunes después de que el coordinador del grupo Centauro, Pedro Castro Muñoz, “le dio permiso” para ir a comprar, pero el uniformado ya no regresó al cuartel.

En su conferencia del martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador, reveló que el policía que presuntamente asesinó al estudiante se había fugado.

Más tarde, fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública confirmaron que uno de los tres agentes puestos a disposición de sus superiores se escapó.

La tarde del lunes, el agente pidió permiso al coordinador del Grupo Centauro, Pedro Castro Muñoz, para ir a comprar a una tienda cercana, lo que aprovechó para darse a la fuga.

El Grupo Táctico de Reacción Inmediata Centauro está conformado por 173 policías estatales que se movilizan en motopatrullas en las ciudades de Acapulco, Chilpancingo, Iguala y Taxco.