Tren Maya
Sedena dejó de erogar 50 MMP que SHCP había etiquetado para terminar el Tren Maya en 2023
El subejercicio se debió a los retrasos en las obras del Tren Maya, que obligaron al gobierno federal a aplazar una y otra vez la entrada en operación de todo el megaproyecto.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El año pasado, los retrasos en las obras del Tren Maya obligaron al gobierno federal a aplazar una y otra vez la entrada en operación de todo el megaproyecto; como muestra de los anterior, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dejó de erogar 50 mil millones de pesos que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le había etiquetado para terminar la obra en 2023.
De acuerdo con el informe del cuarto trimestre, que la SHCP entregó a la Cámara de Diputados, en 2023 la Sedena gastó 93 mil 612 millones de pesos en el Tren Maya, 35% menos que los 143 mil 73 millones de pesos previstos en el arranque del año. Para 2024, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador etiquetó 120 mil millones de pesos para que la Sedena termine las obras del Tren Maya.
En cambio, el año pasado la Sedena gastó grandes cantidades de dinero en un rubro que la SHCP no había considerado cuando preparó el presupuesto de egresos de 2023: la institución castrense erogó nueve mil 387 millones en la “prestación de Servicios Públicos de Transporte Masivo de Personas y Carga Tren Maya”, es decir, en la operación del megaproyecto.
En el informe no aparecen detalles sobre ese gasto, que no parece corresponder al servicio de los trenes, pues en 2023 la Sedena ofreció el servicio público del transporte terrestre durante apenas dos semanas, del 15 de diciembre –fecha en que el presidente Andrés Manuel López Obrador “inauguró” el tren, en una parte solamente– al 31 de diciembre.
La Sedena administra el Tren Maya por medio de la empresa Grupo Aeroportuario, Ferroviario, de Servicios Auxiliares y Conexos Olmeca-Maya-Mexica, la cual opera diversas ramas de negocios que el gobierno de López Obrador le entregó durante el sexenio.
Hasta el momento, todos esos negocios –el Tren Maya, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) o la aerolínea Mexicana de Aviación– funcionan con subsidios del gobierno federal.