CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El presidente, Andrés Manuel López Obrador, justificó que una “revisión técnica” llevó el Tren Maya a detenerse durante más de una hora en las vías por Yaxcabá, Yucatán, mientras el mandatario y una delegación de altos funcionarios, familiares y empresarios viajaban en él.

El incidente manchó la inauguración de uno de los megaproyectos más onerosos del sexenio actual, cuyo costo se disparó a más del doble previsto en un inicio, para llegar a por lo menos 373 mil 699 millones de pesos, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco). De acuerdo con reporteros presentes en la gira del mandatario, soldados trataron de impedir a la prensa acercarse y grabar al tren mientras éste estaba varado.

Cuestionado al respecto hoy en Cancún, López Obrador aseguró que el viaje en tren estuvo “muy bien”, y explicó que la parada se debió a una “revisión técnica”; y refrendó que inaugurará la obra en diciembre.

Ayer, el mandatario resaltó que el tren no busca “la utilidad, la ganancia y mucho menos el lucro”, sino que “es una obra pública en beneficio de nuestro pueblo”.