HIDALGO (apro).- En dos encuentros con militancia en Hidalgo, Adán Augusto López Hernández, aspirante a la candidatura del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la presidencia de la República, llamó a la defensa de los libros de texto gratuito y a respaldar al presidente Andrés Manuel López Obrador ante lo que denominó “embates” del conservadurismo.

En una asamblea informativa en Tula de Allende, el exsecretario de Gobernación llamó retrógradas a las gobernadoras de Aguascalientes, Tere Jiménez, y Chihuahua, Maru Campus, por su oposición a estos materiales, que han cuestionado por el contenido y al acusar una carga ideológica en favor del proyecto político del grupo en el poder, y al ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) José María Aguilar Morales, por suspender de forma temporal la distribución de libros en Chihuahua.   

“Ahí anda la gobernadora de Chihuahua (Maru Campos) , que es la más furibunda conservadora en México; la gobernadora de Aguascalientes (Tere Jiménez), una mojigatería… en realidad ellos no quieren que las niñas y los niños tengan acceso a los libros de textos a la educación, quieren que mantengan el velo en los ojos”, afirmó el también exmandatario de Tabasco, que recibió el grito de “Adán presidente” impulsado, inicialmente, a su llegada, por los maestros de ceremonias, secundado por integrantes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, y posteriormente por docentes, ya durante su intervención.

También atizó: “un ministro de la Corte, Luis María Aguilar, está al servicio de los conservadores, es un retrógrada, un tinterillo de ocasión, y así como ellos hay jueces, con todo el respeto, hasta el obispo de Aguascalientes ya mandó a quemar los libros. Nosotros respetamos la fe de cada quien (pero) la fe dice: A Dios lo que es de Dios, y al César lo que es del César, que aprenda a seguir a observar estrictamente sus principios”, expuso hacia el obispo de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, quien ha invitado a los feligreses a sumarse a las protestas contra este material para el aprendizaje de la educación básica.

“El caso es que ahora se ha desatado una embestida contra los libros de texto gratuitos (…) saben ustedes que andan diciendo que esos libros para lo único que sirven es para enseñarle comunismo a los niños, que los niños van a aprender a comer santos si leen esos libros; así han sido los retrógradas en este país. Es una eterna disputa con los conservadores”, añadió, para después pedir el respaldo social para el presidente.

Después, el exfuncionario comparó el momento actual por la polémica ocasionada por los libros de texto con la historia de Ignacio Ramírez El Nigromante, cuya obra Libro rudimental y progresivo para la enseñanza de primaria que escribió en 1873 fue quemado, hasta que, remembró, Benito Juárez asumió la presidencia y ordenó su reimpresión.

“Cien años después, otro grande, tan grande como Andrés Manuel López Obrador, instruyó para que se volviera a imprimir ese libro”, exaltó.          

En otro momento del discurso, Adán Augusto mencionó que “los mismos de siempre”, quienes, expuso sin referir nombres, no quieren al pueblo, “andan diciendo que ahora que ya se va Andrés Manuel López Obrador de la presidencia se va a terminar la pensión universal para adultos mayores”. Ante esto, aprovechó para repetir las palabras que el mandatario pronunció al conmemorar los cinco años del triunfo de 2018 el pasado 1 de julio: “venga quien venga la pensión universal se queda”.

Después, arremetió contra Xóchilt Gálvez –aunque no la mencionó por nombre–, por dichos del expresidente Vicente Fox Quesada

“Una chachalaca, Vicente Fox, anda diciéndole a su candidata, que quiere que regrese la pensión a los expresidentes de la república y que desaparezcan todos los programas sociales, incluida la pensión universal, porque dice, todos esos que la reciben son unos… yo no lo voy a repetir porque yo respeto al pueblo de México. El zángano, el vividor, el mantenido, es él”, sostuvo.

Después, en otra alusión a Gálvez y crítica a Fox, sugirió que el exmandatario busque trabajo y “se ponga a vender gelatinas” –el oficio que Xóchilt aseguró tuvo en la infancia–.

De la pensión para adultos, preguntó a los asistentes si deseaban “que intentemos bajarla de 65 a 63 años”. Tras la respuesta afirmativa, reafirmó que se quedaría este programa gubernamental, para después recibir los gritos de “presidente”.  

En su intervención, igualmente afirmó que las encuestas –método elegido por su partido para elegir en quien recaerá la candidatura– las publican los medios “por la paga”, “para mantenerle el ánimo arriba a la que las paga, o al que las paga”        

Además de Tula, Adán tuvo una asamblea en Tepeapulco, donde repitió el mensaje de defensa a los libros y crítica a sus opositores. En ese municipio, con la presencia de la alcaldesa Marisol Ortega, además presidenta del Consejo Estatal de Morena, estuvo arropado por la cúpula del Grupo Universidad, que en su visita pasada, del 12 de julio, le agradeció el haber intervenido para que su líder, Gerardo Sosa Castelán, dejara la prisión de máxima seguridad de El Altiplano para seguir un proceso por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita por 58.2 millones de pesos en uno de sus domicilios.