SAN LUIS POTOSÍ, S.L.P., (apro).- El gobierno del estado aseguró que fueron elementos de la Guardia Civil y Policía de Investigación de la Fiscalía de esta entidad, y no el Ejército, quienes entraron a territorio de Nuevo León y rescataron a 34 personas migrantes que, afirmó, se encontraban cautivas en la comunidad de Cruz de Elorza, en el municipio neoleonés de Dr. Arroyo.

Esta versión contradice la información que la mañana de este jueves dio a conocer el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, quien dijo que fueron la Guardia Nacional y el Ejército los encargados de localizar y rescatar al grupo de migrantes que había salido el sábado desde Tapachula en un autobús de una empresa privada, con destino a Nuevo León.

De acuerdo con la información proporcionada por el propietario de la empresa de transporte, el autobús con 50 migrantes originarios de Centro y Sudamérica, así como dos choferes, fue secuestrado durante la madrugada del lunes en territorio de San Luis Potosí, entre Matehuala y Cedral, presuntamente por integrantes del Cártel del Golfo que le pidieron entregar 1,500 dólares por cada persona.

Sin embargo, el gobierno potosino ha negado que el secuestro ocurriera en el territorio del estado, y ha insistido en que tanto el autobús como los migrantes fueron recuperados en Nuevo León.

Seis de los migrantes secuestrados pudieron escapar y caminaron a Matehuala, donde el miércoles fueron encontrados.

Según la versión del gobierno de Ricardo Gallardo Cardona, “el testimonio de los 6 migrantes que llegaron a Matehuala ayer por la tarde, sirvió para que las autoridades de San Luis Potosí implementaran un operativo de búsqueda inmediato, internándose en el Estado de Nuevo León, en la comunidad Cruz de Elorza, donde encontraron con vida a 34 personas más: 10 niños, 14 mujeres y 10 hombres”.

En el comunicado difundido, se detalló que los delincuentes se vistieron como policías e interceptaron al autobús en una comunidad de Dr. Arroyo, abordaron la unidad, les quitaron las pertenencias a los pasajeros y les tomaron fotografías a cada persona.

Sus captores se quejaron de que el chofer no se “había reportado” con ellos, que ya había pasado varias veces por la carretera 57 sin avisarles. Luego los condujeron a una casa abandonada en la comunidad Cruz de Elorza y los amontonaron ahí”.

De los secuestrados, 15 lograron escapar, 9 caminaron rumbo al norte y fueron hallados por autoridades de Nuevo León la noche del martes 16 de mayo, los otros 6 caminaron rumbo al sur durante 16 horas “y con el “aventón” de un samaritano llegaron hasta la cabecera municipal de Matehuala donde fueron auxiliados por la Guardia Civil Estatal y la Policía de Investigación de la Fiscalía General del Estado”.

El área de comunicación social del estado difundió fotografías del grupo de migrantes, así como videos en los que es interrogado una de las víctimas, un hombre al que identifican como Roberto Isaí Aguilar, de nacionalidad hondureña, quien relató lo anterior.

También se afirmó que los elementos del Ejército solo “custodiaron” el convoy de las corporaciones estatales que trasladó al grupo a la delegación de la Fiscalía del estado.

“A pesar de la presión ejercida por medios de comunicación que, basándose en testimonios engañosos de los propietarios de la línea de transporte “turística”, líderes del sector transporte y las propias autoridades policiales de Nuevo León, señalaban a San Luis Potosí como el lugar de los hechos, tanto el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona como el Fiscal del Estado, José Luis Ruíz Contreras se mantuvieron firmes al asegurar que el secuestro no se había cometido en territorio potosino y finalmente fueron éstas autoridades las que rescataron a la mayor parte del grupo”, concluye el comunicado.