CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Cancillería anunció hoy que notificó al gobierno estadunidense de Joe Biden su rechazo a relanzar el plan “Quédate en México”, que el canciller Marcelo Ebrard Casaubon negoció en secreto con el gobierno de Donald Trump durante el periodo de transición, en noviembre de 2018.

“Ante una pretendida implementación de esa política por tercera ocasión, el Gobierno de México, por conducto de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), externa su rechazo a la intención del gobierno estadounidense de devolver a personas procesadas bajo dicho programa a territorio nacional”, anunció la dependencia en un boletín que difundió en la tarde de este lunes.

Durante la aplicación del plan “Quédate en México”, las autoridades de Estados Unidos devolvieron a México a 81 mil 350 personas solicitantes de asilo, para que esperen de este lado de la frontera hasta que una corte de migración determine su suerte. Las organizaciones defensoras de derechos humanos han denunciado al unísono la medida, a la que definieron como violatoria del derecho al asilo.

Cuando asumió el poder, Biden anuló la aplicación de este programa, oficialmente llamado Protocolos de Protección a Migrantes (PPM) o, por su referencia administrativa, como la sección 235 (b)(2)(C) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos.

Biden se refirió al plan “Quédate en México” como una medida “inhumana”; sin embargo, cortes federales de Texas ordenaron a su gobierno a relanzar el programa. En el invierno de 2021, el gobierno mexicano aceptó la reanudación del plan, hasta que en octubre de 2022 la administración de Biden anunció su suspensión.

Durante los 10 meses en los que se reanudó, “Quédate en México” fue utilizado para expulsar a México a 7 mil 500 solicitantes de asilo.

Una corte de Texas ordenó de nueva cuenta a Washington a devolver a los solicitantes de asilo, por lo que la oficina de Biden notificó a la Cancillería “su intención de reiniciar la devolución de personas no mexicanas para que den seguimiento en territorio nacional a su petición de asilo ante los Estados Unidos”; esta vez, sin embargo, la SRE expresó su rechazo.

Aunque la Cancillería no ofreció más explicación sobre su decisión, su negativa sucede unas semanas después de la salida del libro de Mike Pompeo, el otrora secretario de Estado de Trump, en el cual reveló cómo negoció con Ebrard la aplicación de “Quédate en México” durante el periodo de transición.

En su libro, Pompeo confirmó que la única condición que puso Ebrard en la negociación fue de presentar la medida como una decisión unilateral de Estados Unidos y de ocultar a la opinión pública de México –y especialmente a Martha Bárcena Coqui, la futura embajadora de Andrés Manuel López Obrador en Washington-- que el gobierno mexicano estuvo de acuerdo con ella.

Aunque la existencia de estas negociaciones secretas ya había sido ventilado en el libro Border Wars en 2019, la Cancillería mexicana las había negado, por lo que la publicación del libro de Pompeo cayó mal para Ebrard, justo en el momento en que está intensificando su campaña para la conseguir la candidatura de Morena para las elecciones presidenciales de 2024.

A pesar de la negativa de la Cancillería para reanudar la aplicación de “Quédate en México”, el gobierno mexicano sigue aceptando la devolución a su territorio de cientos de miles de nacionales de Honduras, El Salvador, Guatemala, Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua bajo la aplicación del Título 42, otra medida implementada durante la administración de Trump.

El Título 42 utiliza la pandemia de covid-19 como pretexto para devolver de manera automática a las personas que traten de ingresar a Estados Unidos sin documentos; el gobierno de Estados Unidos la ha utilizado para expulsar personas de manera mucho más masiva que el plan “Quédate en México”: según las estadísticas de la Oficina de Protección de Aduanas y Frontera, 2 millones 587 mil personas fueron regresadas a México bajo el Título 42 entre marzo de 2020 y diciembre de 2022, un promedio de 2 mil 536 personas por día.