CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una persona extranjera que no acreditó los requisitos de ley para internarse a México reaccionó con violencia provocando destrozos y amenazando a autoridades y usuarios de la Terminal II del Aeropuerto Internacional de Cancún, Quintana Roo, hechos que fueron registrados en videos que se viralizaron en redes sociales.

En un comunicado emitido este jueves, el Instituto Nacional de Migración (INM) detalló los hechos relacionados con la persona de nacionalidad jamaiquina cuyo ingreso no fue admitido y que fue retornada a Panamá.

La dependencia adscrita a la Secretaría de Gobernación informó que el pasado 23 de diciembre de 2022 una persona de nacionalidad jamaiquina fue inadmitida para ingresar al país al no acreditar los requisitos establecidos en la ley.

Ante esta situación, el sujeto asumió una actitud violenta hacia servidores públicos y usuarios de la Terminal II del Aeropuerto Internacional de Cancún, Quintana Roo.

“Dicha persona arribó el 23 de diciembre y fue conducido al área de segunda revisión del INM en las instalaciones aéreas, para explicarle los motivos que impedían su ingreso a territorio nacional, pero respondió con una actitud inapropiada y en repetidas ocasiones golpeó el vidrio de la estancia hasta quebrarlo”, detalló el INM.

El extranjero tomó uno de los cristales rotos y lo usó para amenazar al personal del INM, así como a los pasajeros ubicados en esa sala y, posteriormente, en la zona de filtros migratorios, detalló la dependencia.

“Trató de escapar de las instalaciones del aeropuerto internacional, pero los agentes federales de migración en turno, con apoyo de elementos de la Guardia Nacional, lograron retirarle el cristal de las manos sin que ocasionara lesiones al personal migratorio o a los usuarios de la sede aérea”, expuso el INM y concluyó:

“En estricto apego a la ley y a los derechos humanos, fue retornado a Panamá con la asistencia de dos agentes federales de migración, el 24 de diciembre de 2022”.

En el video que circuló en redes sociales se ve a personal de seguridad mientras forcejea con el turista en el interior de un cubículo, y después éste sale de ahí con un vidrio en la mano y actitud amenazante. Se escucha a personas que gritaron preocupados por la presencia de niños en la terminal aérea.