CIUDAD DE MÉXICO (apro) .- El Departamento de Seguridad estadunidense informó que se está preparando para poner fin al programa “Quédate en México”, el cual se implementó bajo el mandato del expresidente Donald Trump. Política migratoria que forzaba a migrantes a esperar al sur de la frontera mientras se tomaba una decisión sobre sus solicitudes de protección.

Al implementarse, la organización protectora de derechos humanos, Human Rights First calificó el programa como una “política mortal que pone a los solicitantes de asilo en manos de los cárteles y de los agentes corruptos del gobierno mexicano, que los secuestran, violan, torturan, trafican y extorsionan a ellos y a sus familiares.”

En entrevista con National Public Radio (NPR), organización de disfunción estadunidense, Aaron Reichlin-Melnick, el director del consejo de inmigración, mencionó que en el corto plazo son aproximadamente 5 mil personas las que podrán refugiarse en Estados Unidos durante su proceso judicial.

Estas 5 mil personas son los individuos a quienes se les negó la entrada a Estados Unidos bajo el mandato del actual presidente Joe Biden.

Sin embargo, Reichlin-Melnick recalca que no se sabe que sucedió con los más de 70 mil individuos quienes fueren aprendidos durante el mandato de Donald Trump.

“Puede ser que algunos sigan en México o que se hayan regresado a su previa residencia. Otros, me imagino que están en Estados Unidos ilegalmente.”, mencionó el director.

Esta decisión se da tras el levantamiento de la orden judicial que impedía a los funcionarios de Biden poner fin al programa.

El Departamento de Seguridad declaró que proveerá más información sobre sus preparaciones para acabar el programa “en los próximos días”.

De acuerdo con el departamento de Seguridad Interior, tras los cambios emitidos por Biden con la orden ejecutiva, en mayo pasado se aceptaron 7 mil 200 peticiones de asilo de migrantes centroamericanos.

Desde que Trump estableció el programa, unos 70 mil migrantes centroamericanos fueron rechazados para ingresar a Estados Unidos. La Casa Blanca sostiene que en 2021, por ejemplo, el gobierno procesó unas 670 mil solicitudes de asilo de migrantes centroamericanos que llegaron a la frontera sur.