WASHINGTON (apro).–El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, propuso a su homólogo estadunidense Joe Biden, un plan de cinco puntos para confrontar la problemática inflacionaria mundial, la regularizar al flujo migratorio y la transición energética.

Ante medios de comunicación durante su reunión de 45 minutos en la Oficina Oval de la Casa Blanca, el mandatario mexicano presentó a su anfitrión su propuesta, que abarca la producción de petróleo, arrendamiento de un gasoducto, parques solares, bajara tarifas arancelarias y visas de empleo temporal para mexicanos y centroamericanos.

“Mi propuesta coincide con sus planteamientos y puede resumirse en cinco asuntos básico de cooperación”, señaló López Obrador. El presidente habló durante 31 minutos, mientras que Biden solo 12 minutos.

El mandatario estadunidense que mostró gran cordialidad a AMLO e incluso resalto que a lo largo de toda su carrera política, él ha tratado con respeto a México y reconociéndola como una nación independiente, se declaró listo y ansioso para trabajar en los detalles del plan mexicano.

“Tenemos muchos acuerdos pero también desacuerdos pero lo más importante en trabajar en los detalles… estoy ansioso de abordar el trabajo y coordinación de su plan de cinco puntos”, le respondió el mandatario a López Obrador tras escuchar el proyecto.

El punto número uno del plan consiste en mantener en 72% el incremento de la producción de petróleo crudo mexicano y combustóleo para exportación a Estados Unidos, que implica unos 200 mil barriles diarios del combustible.

AMLO le manifestó a Biden que este nivel de producción de crudo se mantendrá hasta que baje el precio de las gasolinas en Estados Unidos y a la espera de que el Congreso federal estadunidense apruebe el proyecto de ley de la Casa Blanca correspondiente a esta problemática.

“Se ha permitido que estadunidenses que viven cerca de nuestra frontera puedan cargar sus automóviles de nuestro lado de la frontera a menor precio. Nos comprometemos a garantizar el doble de abasto de ese combustible lo cual sería un considerable apoyo”, resaltó Biden.

En la actualidad y esto generado por la presión inflacionaria y los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania, en Estados Unidos el costo del galón de gasolina oscila en 4.78 dólares, mientras que en México cuesta 3.12 dólares, como lo destacó AMLO en la Casa Blanca.

“La mayor parte de esta gasolina la estamos produciendo en la refinería de Pemex que usted nos permitió comprar en Deer Park, Texas”, le machacó el presidente mexicano al estadunidense.

El segundo punto de los cinco del plan consiste en arrendar a Estados Unidos los más de 1000 kilómetros de un gasoducto mexicano que permitiría al estado de Texas transportar gas a los otros tres estados que colindan con México, Arizona, California y Nuevo México.

“Por un volumen capaz de crear hasta 750 mega watts de energía eléctrica y abastecer a 3 millones de personas, aproximadamente”, enfatizó el presidente mexicano a Biden en la Casa Blanca.

El mandatario estadunidense mientras AMLO desmenuzaba su propuesta, tomó noto en las hojas de papel con el membrete del escudo presidencial de su país que mantuvo entre sus manos durante la mayoría del tiempo que duro la sesión ante los medios de comunicación.

“Tres, aun cuando en el Tratado de Comercio México, Estados Unidos y Canadá se han creado mecanismos para eliminación de las tarifas que existen, hay algunas otras que podrían suspenderse de inmediato y hacer lo mismo con medidas reglamentarias y trámites tediosos en el comercio de alimentos y otros bienes; que aminore los precios a los consumidores de nuestros países cuidando por nuestra salud y el medio ambiente”, delineó López Obrador.

El penúltimo punto del proyecto es iniciar un plan de inversión privada y pública entre las dos naciones para producir bienes destinados al robustecimiento de sus mercados y reducir así las importaciones que no sean de la región centroamericana.

AMLO indicó que este plan de inversión dual conllevará eventualmente a la región hacia la transición energética para “promover la creación de parques solares en el estado de Sonora y en otros estados fronterizos” en el norte de la república mexicana.

“Con el respaldo de termoeléctricas y el tendido de líneas de transmisión para producir energía en el mercado interno y exportar a los vecinos de la Unión americana, como Texas, Nuevo México Arizona y California”, explicó el presidente mexicano.

La idea de AMLO es que las economías de las naciones de América del Norte no dependan de los combustibles fósiles que las colocará en la punta de lanza para la modernización energética.

“Cinco, ordenar el flujo migratorio y perimirles llegar a Estados Unidos a obreros, técnicos, profesionales de las distintas disciplinas; mexicanos y centroamericanos con visas temporales de trabajo para asegurar que no se paralice la economía por falta de mano de obra”, explicó López Obrador.

Para no recibir un rechazo inmediato de Biden, el presidente de México le matizó que con estas visas de empleo temporal para mexicanos y centroamericanos, se llenaran los puestos de trabajo que demando su plan de infraestructura aprobado por el Congreso federal estadunidense.

“Así mismo es indispensable, y lo digo de una manera respetuosa y sincera; regularizar ya a migrantes que desde hace tantos años trabajan honradamente contribuyendo al desarrollo económico de esta gran nación”, agregó AMLO a Biden quien desde el primer día de su presidencia envió al Capitolio un proyecto de ley en este sentido.

“Se que sus adversarios, los conservadores van a pegar el grito en el cielo, pero sin un programa atrevido de desarrollo y bienestar no será posible resolver el problema ni conseguir el apoyo del pueblo frente a la crisis, la salida no está en el conservadurismo, sino en la transformación” añadió el mandatario mexicano.

Antes de concluir con sus 31 minutos de discurso y propuestas al presidente Biden, el presidente de México clamo: ¡Que viva Estados Unidos!, ¡que viva México lindo y querido! ¡Viva México!

Con tranquilidad, Biden sonrió a su invitado para luego responderle a una frase que ante de los cinco puntos había destacado en la sesión, que China es básicamente la fábrica mundial.

“De todas las economías del mundo, la de Estados Unidos es la más grande… China no es la fábrica del mundo, nosotros producimos más productos agrícolas”, asentó el presidente Biden.

Antes de que AMLO fuera a la Casa Blanca en donde en compañía de algunos miembros de su gabinete encabezados por el canciller Marcelo Ebrard, se reunió por espacio de más de una hora con Biden y algunos miembros de su gabinete, ya había desayunado con la vicepresidente Kamala Harris, en la residencia oficial de esta.

Del tema migratorio y la propuesta de AMLO, Biden se limitó a explicar que el año pasado incrementó en 300 mil el número de visas de empleo temporal para mexicanos, y que respecto a las visas H2 que abarcan la contratación de mano de obra extranjera, planea eventualmente seguir incrementando ese tipo de visado; H2A y H2B.

Por otro lado, la AMLO y Biden también hablaron de la cooperación entre sus gobiernos para continuar desmantelando las redes de tráfico de personas, sobre todo a raíz del caso de la muerte de más de medio centenar de migrantes a bordo de la caja de un tracto camión a las afueras de San Antonio, Texas.

En materia de seguridad, Estados Unidos y México se comprometieron a crear una Equipo de Tarea Binacional para combatir al crimen organizado transnacional que trafica drogas de todo tipo pero en especial las sintéticas elaboradas con fentanilo.

Biden también le prometió a su invitado mexicano que se mantendrá el trabajo y colaboración para aminorar el trasiego ilegal de armas de Estados Unidos a México, y para con el lavado de dinero procedente de la venta de enervantes en el mercado negro estadunidense.

Tras su salida de la Casa Blanca, AMLO llevó a cabo una comida privada, cuyos detalles no se dieron a conocer, luego fue ante los monumentos de Franklin Roosevelt y Martin Luther King, a presentar una ofrenda floral y rendirles homenaje.

Este miércoles 13 julio antes de regresar a México, el presidente López Obrador encabezará un desayuno privado con magnates del sector privado, de entre los cuales del lado mexicano se destaca el nombre del billonario Carlos Slim.