CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, se defendió de las acusaciones por “acarreo” que los partidos de oposición presentaron esta jornada en su contra, luego de evidenciar en sus redes sociales su oferta de llevar a votar a quien quisiera subirse a su camioneta.

En conferencia de prensa citada para celebrar la participación en la jornada de revocación de mandato, el dirigente partidista atajó:

“Dar raite no es delito”.

De hecho, Delgado culpó al INE porque, dijo, cambiaron la casilla de votación en un sector de Iztacalco, donde habría llevado a unas diez personas a una casilla, cuestionando luego la ubicación de casillas que “parecía planeada para desincentivar la participación ciudadana”.

En una más de sus arengas contra los consejeros electorales, Mario Delgado consideró que fueron ellos quienes resultaron “revocados” dado que pese a los obstáculos que consideró impusieron, la gente participó en el ejercicio.

“No se trata de embates contra el INE, lo que tenemos es una institución que claramente ha sido rebasada por el deseo de la gente por vivir en una auténtica democracia, entonces algunos de ellos son personas que están más interesados en rendirles cuentas a sus jefes”, dijo.

En su exposición, además de felicitar la participación, destacó el arranque de un tema: la reforma electoral que en los próximos días presentará el presidente López Obrador con el propósito de modificar la institucionalidad electoral y eliminar a los diputados plurinominales.