Zacatecas, Zac. (proceso,com.mx).- Un grupo de policías estatales comenzaron la mañana de este sábado un paro de labores y una manifestación afuera del edificio de la Secretaría de Seguridad Pública, para exigir la destitución de tres mandos y un plan de apoyo económico para las familias de los agentes caídos.

Los uniformados exigen la destitución del subsecretario de Seguridad Pública, José Aciano Medrano, del encargado de la dirección de la Policía Estatal, Israel Reyes y de Lizbeth Takahashi Castañeda, jefa de división de fuerzas estatales de la corporación, a quienes acusan de abuso de poder, hostigamiento y de obligarlos a realizar acciones ilegales, como ingresar a inmuebles sin órdenes de cateo.

Demandan además la salida de la corporación de "Los chilangos", como apodan a un grupo de ex policías federales contratados durante la gestión del ex secretario, Arturo López Bazán, pues los acusan de dañar la imagen de la Policía Estatal al cometer abusos y arbitrariedad contra la población.

Los policías inconformes denuncian que la licencia colectiva de portación de armas está vencida desde hace un semestre, por lo que no les permiten usar su arma de cargo mientras están de descanso y temen por su vida después del asesinato de 16 agentes en lo que va de este 2022.

Exigen también que la Secretaría otorgue apoyos económicos a las familias de policía caídos, pues " sus familiares andan sacando créditos, endeudándose para cubrir los gastos funerarios, eso no es justo", señaló uno de los inconformes.

Los agentes entregaron un pliego petitorio al secretario de Seguridad Pública, el general Adolfo Marín Marín, quien les ofreció una mesa de diálogo sólo a una comisión, lo que fue rechazado por los uniformados.

Al paro de labores se sumaron durante el día agentes de las seis unidades regionales de seguridad publica, ubicadas en los municipios de Trancoso, Villa de Cos, Sombrerete, Río Grande, Villanueva y Fresnillo.

Los policías se congregaron afuera del despacho del secretario de Seguridad Pública para gritarle "da la cara" e incluso se agarraron a golpes con uno de los escoltas del funcionario.

Tras cerrar las puertas de la base de la corporación estatal, los uniformados colocaron pancartas con sus reclamos y siguen con el paro de labores.