CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Andrés “N” aparentaba ser una persona tranquila, normal, recuerdan sus vecinos. Hasta que en mayo del año pasado descubrieron que se trataba de un asesino serial y que en su casa había 4 mil 300 restos óseos que, después de una investigación forense, autoridades del Estado de México descubrieron que eran de 19 víctimas, de las cuales seis ya fueron identificadas.

Andrés Filomeno Mendoza Celis, apodado como El Feminicida de Atizapán, es acusado del asesinato de 19 personas. A medio año de su arresto, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) dio a conocer que 11 familias proporcionaron su ADN para que fuera comparado con los más de 4 mil 300 restos óseos que fueron encontrados en el domicilio del procesado.

Mientras se encuentra en el penal de alta seguridad de Tenango del Valle, las autoridades mexiquenses realizaron las pruebas genéticas y se logró identificar coincidencias de ADN en seis casos, por lo que se llevará a cabo la judicialización de las investigaciones para cada caso.

“La Fiscalía General de Justicia del Estado de México informa que derivado de las diligencias ministeriales que realizó esta institución en un inmueble de la colonia Lomas de San Miguel, en Atizapán, y el posterior trabajo de la Coordinación General de Servicios Periciales, ha sido posible identificar hasta el momento a seis personas, por lo que se han llevado a cabo formalmente las notificaciones a sus respectivas familias”, se leyó en el comunicado.

De acuerdo con la información de la Fiscalía, la excavación en el domicilio de quien fuera carnicero en el municipio de Tlanepantla duró varios meses y, además de los 4 mil 300 restos óseos, se hallaron “libretas con nombres de personas, descripciones de las mismas, fotografías, bisutería, bolsos de mujer, calzado y diversos videos en formatos VHS y 9 milímetros”.

Las osamentas que se encontraron en la casa de Andrés fueron sometidas a un proceso de lateralización, es decir, se compararon para determinar si pertenecían a la parte izquierda o derecha de un mismo cuerpo, con lo cual se llegó a la conclusión de que pertenecían a 19 víctimas.

Tras haber realizado las primeras indagatorias con ayuda de los datos encontrados en el lugar, personal de la Fiscalía contactó a los familiares de 11 probables víctimas, de las cuales había información en el domicilio de Andrés “N”.

Estas familias acudieron a las inmediaciones de la FGJEM, lugar en el cual se llevó a cabo “un proceso de extracción, purificación, cuantificación, amplificación y tipificación, para obtener el perfil genético”, el cual fue comparado con la información de las personas que proporcionaron su ADN para el estudio, de las cuales se encontró coincidencia en seis de las víctimas.

La dependencia aseguró que su personal se encuentra realizando diligencias para identificar a las 13 personas restantes, quienes “se tienen contabilizadas como víctimas en esta investigación”.