Oaxaca
Puente Madera se declara en “alerta máxima” para impedir la invasión del Pitayal
Bloquean la carretera e incendian cuatro vehículos en la zona donde se pretende instalar uno de los Polos de Desarrollo para el Bienestar asociados al Corredor Interoceánico impulsado por el gobierno de la Cuarta Transformación (4T)OAXACA, Oax. (proceso.com.mx).- Con un bloqueo carretero y el incendio de cuatro vehículos, entre ellos una patrulla de la policía municipal de San Blas Atempa, la comunidad en resistencia de Puente Madera se declaró en “alerta máxima” para impedir la invasión del Pitayal donde se pretende instalar uno de los Polos de Desarrollo para el Bienestar (PODEBI) asociados al Corredor Interoceánico impulsado por el gobierno de la Cuarta Transformación (4T).
Los hecho ocurrieron la mañana de este sábado 12 de febrero cuando personas vinculadas con el proyecto del Corredor Interoceánico, custodiadas por elementos de la Policía Municipal de San Blas Atempa y la Procuraduría Agraria intentaron entrar al monte del Pitayal, sitio resguardado por la comunidad binnizá de Puente Madera donde se pretende instalar uno de los Polos de Desarrollo para el Bienestar.
La patrulla y otras tres unidades fueron colocadas a un costado de la carretera Transistmica a la altura de la comunidad de Puente Madera tramo Juchitán –Tehuantepec y luego les prendieron fuego hasta quedar calcinadas.
“Como consecuencia de esta invasión, los comuneros del Pitayal retuvimos y tomamos acciones legítimas para la protección de nuestras tierras colectivas”, sostuvieron en un comunicado.
Mencionaron que “el clima de tensión en nuestra comunidad viene desde el pasado 10 de febrero, en donde Marcos Peza Manuel y Floralia Morales Hernández, personas vinculadas con el PODEBI comenzaron a realizar acciones de deforestación y cercado en el Pitayal, argumentando tener constancias ‘válidas’ de posesión sobre las tierras”.
A partir de ese día, destacaron, “la comunidad en resistencia de Puente Madera se declaró en Alerta Máxima para la protección del Pitayal”.
Resaltaron que “estas acciones se enmarcan en el actual estado de violencia que estamos viviendo en la región, con las elecciones a gobernador a la vuelta de la esquina y el interés de impulsar obras de infraestructura sobre nuestros territorios, eso incrementa el uso de la violencia del gobierno, en todos sus niveles, sobre quienes defendemos nuestras tierras ancestrales”.
Consideran que “la mentira de que los polos de desarrollo van a traer empleo y mejoras para nuestra región han sido promovidas de forma indiscriminada por el gobierno federal, el estatal y los municipales, mediante procesos de consulta indígena que sirven en última instancia para maquillar el despojo y la destrucción de nuestro entorno”.
Los inconformes reiteraron “que la violencia nace del Estado y la ejercen los políticos profesionales liderados por Morena y todos los partidos políticos por igual, quienes nos excluyen, no escuchan razones, nos quieren explotar y despojarnos de las tierras que habitamos y defendemos”.
“La violencia nace del Estado que calumnia a quienes tenemos razones para decir no a la venta de la tierra, y que suma a sus filas a personas de nuestra comunidad a cambio de dinero, con actas falsas de asamblea, documentos fraudulentos y promesas de progreso y desarrollo desde una lógica propia del indigenismo, generando con esto un ambiente de división intercomunitario”, puntualizó.
Finalmente insistieron en que “el monte del Pitayal no está en venta. No permitiremos que se parcelen tierras de uso común para el aprovechamiento industrial y denunciamos al presidente municipal de San Blas Atempa, Noel Hernández Rito, de incentivar esta situación de tensión, por señalar y poner en riesgo a nuestros compañeros y a toda a la comunidad”.
Responsabilizaron directamente a Mariano de La Rosa, Jesús Celaya Ruiz, José Celaya Ruiz, Justina Lucero Juárez, Marcos Peza Manuel, Floralia Morales Hernández de incitar la venta de las tierras de uso común del Pitayal e incentivar la persecución y criminalización que pueda suscitarse en contra de los habitantes de esta comunidad.