Corrupción
López Obrador reconoce que “puede haber todavía mordidas, pero no tarascadas”
Al hablar del robo al presupuesto, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que “puede haber todavía mordidas, pero no tarascadas”.CIUDAD DE MÉXICO (apro).– A cuatro años de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que “puede haber todavía mordidas, pero no tarascadas”, al hablar del robo al presupuesto.
“No dudo que todavía hay, pero se está limpiando de arriba para abajo, como se barren las escaleras, y ya no hay las tarascadas que se le daban al presupuesto (...) antes los de arriba se servían con la cuchara grande”, dijo al encabezar la presentación del plan de salud IMSS-Bienestar en Loreto, Baja California Sur.
En varias ocasiones, el presidente fue interrumpido por docentes de la entidad que buscaron plantearle algunos pendientes como la asignación de presupuesto para garantizar plazas y por lo que esta semana se mantuvieron en diversas movilizaciones y convocaron a un paro laboral.
En una de las interrupciones en la que negaban que ya no hay robo del presupuesto, el presidente les respondió: “Discúlpenme, maestros y maestras, ya no es igual y ustedes deberían de saberlo, nosotros ya no permitimos la corrupción arriba”.
Enseguida expuso el ejemplo de que en su gobierno no hay condonación de impuestos ni evasión fiscal.
“Piensen en un banco, el más famoso, en una empresa, la más famosa, la más importante, pues esa empresa que están pensando, ese banco no pagaba impuestos y no solo eso, les devolvían impuestos y saben qué, eso ya se terminó porque ya está en el artículo 28 de la Constitución que es un delito, que está prohibido la condonación de impuestos”, dijo.
Señaló que una empresa evadía al año 16 mil millones de pesos, “lo que es el presupuesto completo de Baja California Sur, así era la corrupción, entonces claro que ha cambiado. Por eso dije me canso ganso”.
El presidente López Obrador dijo que sin corrupción ni privilegios en cuatro años no han aumentado impuestos, ni los precios de las gasolinas o de la luz.
“Llevamos casi cuatro años, con pandemia, sin aumentar la deuda pública, llevamos cuatro años, a ver cómo les va a quedar el ojo, ¿saben desde cuándo no se devaluaba el peso, o cuántos años tenía devaluándose el peso?, casi 50 años. Llevamos cuatro años y no solo no se ha devaluado, se ha apreciado el peso”, subrayó.
Esa es la razón por la que, afirmó, su modelo sí funciona. “Estamos llevando a cabo también cambios profundos porque estamos arrancando de raíz la corrupción que había, que era el principal problema de México”, pero había manipulación para sostener que el principal problema era la seguridad, la educación o la salud.