CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que este año, Petróleos Mexicanos (Pemex), va a cerrar con una producción diaria de un millón 800 mil barriles pese a los problemas heredados y los accidentes como el recién ocurrido en la plataforma Ku-Maloob-Zaap (KMZ), ubicada en el Golfo de México que dejó pérdidas humanas y económicas por un monto de 25 millones de dólares diarios.

“También establecimos como meta no extraer más de dos millones de barriles diarios, porque solamente vamos a extraer lo que se va a requerir para producir las gasolinas en México, porque ya no vamos a vender petróleo crudo al extranjero y vamos a estar comprando gasolinas y diésel, vamos a darle valor agregado a la materia prima”, indicó en la conferencia matutina.

Al respecto, el mandatario señaló que Pemex está remontando una crisis heredada de muchos años de abandono porque el propósito que tenían los gobiernos neoliberales, dijo, era arruinar la industria petrolera del Estado para poder privatizar el petróleo.

“Era el plan principal, arruinar a Pemex y arruinar a la Comisión Federal de Electricidad”, aseguró AMLO.

No obstante, dijo que “afortunadamente” el pueblo de México dijo “basta” y se dio el cambio en el gobierno federal.

“Nosotros nos hemos dedicado a fortalecer a Pemex y a la Comisión y ya sacamos a Pemex del hoyo en que se encontraba; porque en 14 años consecutivos se cayó la producción, y llegamos, se detuvo la caída y ya estamos de nuevo extrayendo más crudo”, afirmó.

Enseguida, explicó que en 1994 fue la producción mayor en la historia del petróleo en México, que alcanzó tres millones 400 mil barriles diarios.

Luego, los gobiernos anteriores se enfocaron en arruinar los campos y afectar el yacimiento principal de Cantarell, considerado el más grande del país.

“Porque para sacar petróleo sin recato, sin cuidar el medio ambiente, sin pensar en el futuro, les inyectaron a los pozos nitrógeno para sacar más y esto con el tiempo produjo que los pozos petroleros se contaminaran con gas y se tuviese que quemar gas como nunca se había quemado, un gran desperdicio”, aseguró el presidente Obrador.

Por ello, mencionó que después de tener tres millones 400 mil barriles diarios, la producción comenzó a descender y su gobierno llegó con un millón 700 mil, es decir, la mitad de la que generaba Pemex.

“Toda la inversión de Pemex en el periodo neoliberal la orientaban al norte y a los campos de aguas profundas para beneficio de las empresas. Entonces, no se extraía más petróleo, se gastaba más”, señaló el mandatario.

Enseguida, dijo que la estrategia de su administración fue reorientar la inversión donde está el petróleo en tierra, en aguas someras y el sureste.

“Estamos bajando el costo de extracción, ya estamos extrayendo petróleo a un costo de cuatro dólares el barril y el promedio es de 10 y 12 dólares de extracción, por la mala planeación, porque lo que les importaba no era extraer el petróleo, sino entregar contratos a empresas y hacer negocio, lo que predominaba era la corrupción”, insistió el mandatario.

Dijo que ahora se están descubriendo nuevos yacimientos en tierra y en aguas someras, y aseguró que su gobierno está sacando a flote a Pemex pese a los accidentes como el registrado el domingo pasado en el Golfo de México.