CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El Papa Francisco envió una carta a los habitantes del poblado michoacano de Aguililla, asediado por los cárteles de la droga, a quienes les dijo que “no están solos”, pues la Iglesia apoya a los que “sufren”.

Fechado en la ciudad de Roma, el documento fue recibido por el obispo de Apatzingán, Cristóbal Ascencio, quien lo dio a conocer.

Señala la misiva papal: “He tenido noticias de los grandes sufrimientos causados por los violentos enfrentamientos entre bandas rivales de narcotraficantes que afectan a los habitantes de las poblaciones situadas en el territorio de esa Iglesia particular que el señor ha confiado a tu cuidado pastoral”.

El pontífice dice comprender el sufrimiento y la  impotencia de los habitantes de Aguililla, a quienes les pide no darse por vencidos.

“Recuerden que no están solos, que el Señor es fortaleza y misericordia, que nunca abandona a sus hijos, que la Iglesia es atenta y cercana a todos los que sufren”.

Señaló que “Jesús camina vehementemente a nuestro lado sobre todo en los momentos de pruebas y de tribulación, además, él está dispuesto a darnos 100 veces más, pero sin olvidar que su paz supone la cruz”.

Y agregó:

“Mi oración al Señor Jesús para que puedan ir adelante en la vida y él les ayude a llevar sus cruces y sufrimientos con mansedumbre, fortaleza y paciencia”.

En abril pasado, el representante del Papa en México, el nuncio apostólico Franco Coppola, realizó una visita a Aguililla, acompañado por el obispo Cristóbal Asencio. Ahí ofició una ceremonia religiosa y se reunió con las víctimas de la violencia.

El territorio de Aguililla actualmente es disputado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y por Cárteles Unidos, lo cual ha provocado que sus caminos de acceso estén bloqueados, provocando desabasto de alimentos y medicinas entre la población.