GUADALAJARA, Jal. (apro).- El vocero del Comité Salvemos Temacapulín, Acasico y Palmerejo, Gabriel Espinoza, denunció que a pesar de existir una suspensión definitiva, cuando acudieron el pasado 28 de mayo a realizar un peritaje ambiental, encontraron que había 50 obreros dentro de las instalaciones de la presa El Zapotillo.

“La Conagua ha pretendido engañar y burlar el fallo de la Suprema Corte de Justicia del 7 de agosto del 2013, y la suspensión definitiva que se ejecutó el 3 de julio de 2014” puesto que se “está construyendo el tanque de amortiguamiento” y obras complementarias, recalcó.

Consideró que sería una táctica “para que en un momento dado, lo que algunos políticos han dicho, ‘la presa ya está hecha ya nada más hay que ponerle el tapón y eso fue responsabilidad de otros’”.

Refirió que en los últimos tres presupuestos federales se destinaron millones de pesos en mantenimiento preventivo, pero en realidad el dinero se utilizó para infraestructura. “Es una manera engañosa de ir avanzando. No suben la cortina, pero sí hacen obras complementarias”, reiteró.

Por su parte, la coordinadora de Área de Defensa de Territorio de Imdec, María González, informó que en un mes estaría el peritaje, con el cual, de nuevo se confirmará las violaciones a un medio ambiente sano.

Los activistas coincidieron en que analizan presentar recursos jurídicos para que se sancione el desacato, ya que existen fallos vigentes que establecen que la cortina de la presa El Zapotillo debe permanecer paralizada, pero no se especifica sobre obras complementarias.