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Estudian impacto del etiquetado frontal en alimentos y bebidas
El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) anunció un estudio para evaluar la efectividad del etiquetado frontal y tener información sobre si tienen impacto en la dieta y hábitos de consumo de la población.CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).– El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) anunció un estudio para evaluar la efectividad del etiquetado frontal y tener información sobre si tienen impacto en la dieta y hábitos de consumo de la población.
Para ello, anunció que ya da seguimiento a un grupo de personas y evalúa las características de la dieta y tipos de alimentos consumidos antes y después de la implementación del etiquetado frontal.
Con esto, el INSP busca conocer si hubo una modificación en la alimentación, y estima que el impacto en la salud de la población mexicana se podrá observar dentro de uno o dos años, cuando se presenten los primeros resultados.
El pasado 1 de junio entró en vigor la primera fase de la NOM-051 sobre etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas.
Para la evaluación de resultado, el Instituto comparará también las ventas de los productos con sellos y sin sellos, antes y después de un periodo considerable de la entrada en vigor del etiquetado frontal, así como las variables de consumo derivadas de la pandemia por covid-19.
El INSP señaló que, por ahora, es muy pronto para hacer un análisis comparativo por marcas y evaluar los cambios en hábitos alimenticios, debido a la existencia de productos nuevos sin antecedentes de ventas a partir de la implementación del etiquetado de advertencia, lo cual podría provocar un sesgo en los resultados.
Como ejemplo, explicó que, en Chile, país con una normatividad similar, se realizó una comparación en las ventas de bebidas con sellos “Alto en azúcares” antes de la entrada en vigor de la normatividad en 2015, y después, en 2017, y se encontró que el etiquetado frontal redujo 23.7 por ciento las ventas de ese tipo de productos.
El INSP estima que en México más de 70 por ciento de las muertes de adultos son por causa de las Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT).
Lo anterior es evidencia de los cambios sustanciales en la dieta y hábitos alimenticios de los últimos 30 a 40 años, donde el consumo de energía (kilocalorías, kcal) por persona se ha incrementado 580 kcal/día a escala mundial, como resultado de mayor ingesta de alimentos procesados, entre otros.
En este contexto, el artículo “Revisión del etiquetado frontal: análisis de las Guías Diarias de Alimentación (GDA) y su comprensión por estudiantes de nutrición en México” estima que el etiquetado de alimentos es una herramienta fundamental para la difusión de información nutrimental, con potencial para influir en la elección de alimentos, así como en los hábitos alimenticios de las y los consumidores.
Esto porque en la mayoría de los casos el etiquetado nutrimental es la única fuente de información con la que cuenta la persona consumidora en el punto de venta, por ello, el Instituto apunta que es importante que sea fácil de localizar, leer, interpretar y comprender.