GUANAJUATO, Gto., (apro).- Muros derribados, automóviles arrastrados y aplastados; puentes y viviendas anegados y la inundación del Centro de cómputo y control de seguridad y protección civil fueron algunos de los numerosos daños que ocasionaron las fuertes corrientes derivadas de varias horas de lluvia entre la noche del sábado y la madrugada del domingo en San Miguel de Allende.

Durante casi siete horas de la noche y madrugada del domingo, se alcanzó una precipitación de casi 25 milímetros, suficiente para que en algunos puntos de la ciudad el agua llegara al metro de altura.

El Centro de cómputo y control del gobierno municipal, desde donde opera la atención a las llamadas de emergencia por incidentes delictivos y de contingencias quedó literalmente inundado y algunos de los empleados encerrados por el agua y el riesgo de que se desatara algún corto circuito, hasta que fueron rescatados por sus compañeros.

Por un lapso de tiempo el servicio estuvo suspendido, lo mismo que la atención en materia de protección civil.

En una ficha informativa del gobierno municipal se confirmó que el equipamiento de la dirección de Protección Civil sufrió daños, por lo que los trámites en dicha instancia quedaron suspendidos hasta que se ubicara una nueva sede.

Así, el personal de PC que acudió a atender diversos reportes en el transcurso de la noche, debió regresar a las instalaciones a rescatar mobiliario y equipo y a extraer el agua.

El estacionamiento y parte del edificio administrativo del gobierno municipal también fueron anegados por el agua.

Las corrientes ocasionaron que algunos automovilistas quedaran atrapados en puntos de la ciudad, entre el lodo y la tierra, basura y yerbas que arrastraron.

Las bardas de herrería recién colocadas en el puente del Obraje fueron derribadas por el paso del caudal del arroyo Las Cachinches.        

Una unidad del servicio público de transporte cayó al cauce de un arroyo en la salida a Dolores Hidalgo, a causa de los deslaves y el agua.

En algunas colonias como La Luz, el agua inundó viviendas y también derribó muros y empujó varios vehículos, incluso dentro de patios y cocheras de algunas de las casas, provocando daños en las unidades y portones.

Según la página News San Miguel, una mujer vecina de dicha colonia sufrió de hipotermia cuando salió a la tormenta para intentar poner a salvo sus pertenencias, que también resultaron averiadas.

Densas capas de lodo entraron también a locales comerciales en la zona de los arcos de Guadalupe.

También hubo otros negocios como el exclusivo hotel Live Aqua que sufrieron inundaciones.

En la colonia Guadalupe, una calle que se abrió sobre el cauce de un arroyo federal para dar acceso a un nuevo fraccionamiento en construcción, recuperó el camino del agua y quedó anegado.

Personal del gobierno municipal recorre desde el transcurso del domingo y este lunes los puntos afectados para efectuar limpieza y algunas reparaciones iniciales, aunque la molestia de vecinos de las colonias con más daños se volcó hacia dichas autoridades, por la construcción invasiva de fraccionamientos y obras inconclusas.