CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Al inicio de la vacunación masiva en la alcaldía Cuauhtémoc, afuera de la Unidad de Macro Vacunación de la biblioteca José Vasconcelos, se presentaron largas filas bajo el sol, poca sana distancia y hasta breves discusiones entre adultos mayores con los organizadores.

A diferencia de la buena organización que se ha presentado en otros puntos de vacunación, en éste, ubicado a la salida de la estación del metro Buenavista, se observó a cientos de adultos mayores con bastón y en silla de ruedas haciendo una fila en curvas y sin ningún control, los más afortunados trajeron sombrilla para protegerse del sol del mediodía.

Poco antes de las 11:00 de la mañana hubo un ligero enfrentamiento entre algunos adultos mayores que tenían cita a las 11:00 horas, porque los integrantes de Participación Ciudadana le dijeron que tenía que formarse en esa larga fila hasta que les tocara, lo que les causó molestia.

“El gobierno me manda un mensaje y me dice que no me forme desde temprano y llego y hay este desorden y me mandan a formarme hasta allá”, dijo enfadado el señor José.

 

A diferencia también de otras unidades, en la biblioteca Vasconcelos el mismo punto de entrada de los adultos mayores es el de salida, lo que provoca que las personas se encuentren de frente y se rompa la sana distancia. Además hay una banqueta que obstaculiza El Paso a quienes traen bastón o silla de ruedas.

Minutos después de las 11:00, un par de trabajadores pidió a los familiares de la personas que se van a vacunar hacer espacio porque apenas iban a colocar una carpa para que la personas no estuvieran en el sol.

También se han presentado testimonios de gente que no le tocaba hoy la inmunización, pero acompañó a otro familiar o vecino que sí tenía cita y también fue vacunada.

Adentro, la situación mejora

Al pasar la puerta de entrada a la Macro Unidad, la organización mejora notablemente. Dentro, se observa a más servidores de la nación que integrantes de Participación Ciudadana y “Ponte Pila”.

La vacunación en este punto está a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), tanto de los médicos que aplican la dosis de AstraZeneca, como de los militares que vigilan la seguridad. En el exterior también participa personal de una empresa de seguridad privada que intenta ayudar dando instrucciones con altavoces.

A la salida, los comentarios de los adultos mayores son favorables, opinan que “los trataron muy bien”, “fue muy rápido y la gente es muy amable”.