UNAM
Persiste discriminación y rechazo contra personas trans, alertan especialistas de la UNAM
Alethia Fernández de la Reguera Ahedo, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), advirtió que el 25% de las personas trans han sufrido discriminación y el 40% sintió rechazo de sus padres y su entorno al descubrir su identidad de género.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La discriminación y el rechazo contra las personas trans continúa y afecta sus derechos más básicos, como el derecho a la identidad, salud, protección social y al trabajo, señalaron académicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En el marco del Día Internacional de la Visibilidad Transgénero que se conmemora el 31 de marzo, la investigadora Lucía Gabriela Ciccia del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG), indicó que las personas trans viven rechazo y discriminación desde la infancia y que esta situación persiste hasta la adultez.
La universitaria recordó que el derecho a la identidad es un derecho humano incluso anterior al de la familia y que las leyes de identidad de género permiten a las personas trans cambiar su nombre en su acta de nacimiento para tener la identidad con la que se identifican, ejercer otros derechos e insertarse en los distintos ámbitos de la sociedad.
Sin embargo, solo 13 estados en el país cuentan con leyes de identidad de género: Ciudad de México, Coahuila, Colima, Chihuahua, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sonora y Tlaxcala.
Alethia Fernández de la Reguera Ahedo, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) advirtió que el 25% de las personas trans han sufrido discriminación y el 40% sintió rechazo de sus padres y su entorno al descubrir su identidad de género.
Esto de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación por Motivos de Orientación Sexual e Identidad de Género 2018, del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
La encuesta también reveló que el 9.9% de las personas mayores de 16 años que se identifican como gays, lesbianas, bisexuales, trans (transgénero, travestis, transexuales) y otras identidades de género, siempre supo que tenía una identidad no normativa.
Mientras que cerca del 25% de los encuestados sufrieron discriminación en la atención médica o no pueden acceder a estos servicios, mientras que el 50% ocultó su identidad de género frente al personal médico por miedo al rechazo, maltrato y la discriminación.
“Muchas veces nos enfocamos a las formas extremas de violencia directa que viven las personas trans: asesinatos, violaciones, desapariciones forzadas, pero también tenemos que empezar a atender los primeros espacios de socialización”, resaltó Fernández de la Reguera, al comentar que la familia y la escuela son los entornos en los que dijeron vivir mayor discriminación y violencia.
Las personas trans a menudo reciben ofensas verbales, chistes ofensivos, expresiones de odio, agresiones físicas y acoso y enfrentan obstáculos para acceder a un trabajo digno y formal “a pesar de que tengan altos grados de escolaridad”, lamentó.
Por lo que resaltó la importancia de avanzar en un enfoque de derechos humanos que permita garantizar que las personas con identidades no binarias puedan salir a la calle y sentirse seguras, estar en un salón de clases sin ser acosadas y que en su entorno familiar no sean maltratadas.
“Las personas trans tienen problemas de inserción laboral porque se las interpreta como personas no normales. Justamente lo que queremos, a través del marco legal, es normalizar que hay múltiples identidades posibles y que una genitalidad no determina una identidad de género”, añadió Ciccia.
Las investigadoras coincidieron en la necesidad de discutir las iniciativas de ley para el cambio de identidad de género de las infancias trans, que han quedado “congeladas” por el desconocimiento y los intereses de grupos que se oponen a la ampliación de derechos de las diversidades.
En la Ciudad de México se permite el cambio de identidad de género y de nombre en el acta de nacimiento, pero sólo para personas mayores de 18 años, mientras que, en Jalisco, los menores de edad pueden acceder a cambiar su identidad de género.
“El espíritu del Día Internacional de la Visibilidad Transgénero es el derecho y respeto a la vida, a una vida digna; es justamente pensar que tenemos derecho no solo a una identidad sino también a una calidad de vida que implica ser respetada”, concluyó Ciccia.