CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó “el uso excesivo de la fuerza contra personas de la caravana de migrantes en Chiapas”, luego que un niño de tres años, de nacionalidad guatemalteca, fue herido por la Guardia Nacional.
    
En su cuenta de Twitter, la CIDH se refirió al operativo instrumentado el fin de semana para contener la caravana de más de 6 mil personas migrantes que salieron de Tapachula, Chiapas, rumbo a la capital mexicana.
    
Ante los actos de violencia registrados, el organismo consideró que “el uso de la fuerza debe regirse por principios de fin legítimo, absoluta necesidad, proporcionalidad y progresividad”, por lo que instó al Estado mexicano a “investigar, sancionar y reparar integralmente a las personas migrantes por violaciones a sus derechos humanos”. 

Igualmente, lo urgió a “observar estrictamente el deber de protección especial de niñas, niños y adolescentes que buscan protección internacional”, así como “priorizar en todas la medidas o política que pueda afectarles”. 

De acuerdo con información divulgada por los medios, durante el operativo de contención de la caravana migrante, un niño de tres años, originario de Guatemala, fue lesionado en el puente de revisión Viva México, que se ubica a 10 kilómetros de Tapachula, Chiapas.

Según la abuela del menor, fue herido cuando elementos de la Guardia Nacional los embistieron y con un escudo lastimaron la cabeza del niño, quien fue atendido por miembros de la corporación y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). 

La condena de la CIDH ocurrió luego de que organizaciones de derechos humanos “denunciaron políticas de externalización de fronteras, expulsiones colectivas y obstáculos de acceso a la justicia”, en una audiencia durante el 181 Periodo de Audiencias Públicas, realizado de manera virtual.

En la audiencia “Protección de personas en movilidad humana en Estados Unidos, México y el Norte de Centroamérica”, las organizaciones exigieron una “respuesta integral para atender vulneraciones a los derechos humanos”, durante el tránsito de las caravanas migrantes. 

La CIDH expresó su “preocupación ante riesgos generados por expulsiones, y recordó a los Estados su deber de proteger de manera integral los derechos humanos de las personas en movilidad y la necesidad de incorporar un enfoque interseccional”.