CIUDAD DE MÉXICO (apro). – El director general de Promoción de la Salud, Ricardo Cortés Alcalá, reconoció que el alza en el número de contagios por covid-19 es producto de la temporada invernal, no solo en México, sino en el mundo, pero principalmente por los festejos de Navidad y el Año Nuevo.

“Sí se empieza a ver un reflejo de lo que se ha vivido en las últimas dos semanas en estos festejos, en los que la gente se reúne y eso eleva el riesgo de contagios, sobre todo si estamos en un espacio cerrado, sin ventilación, por eso la importancia de ventilar nuestros espacios cerrados, como el laboral o el hogar, el uso del cubrebocas y el reducir el tiempo de exposición.

“Si todo eso lo hacemos en conjunto, entonces reducimos drásticamente el riesgo de contraer esta enfermedad particularmente”, indicó en la conferencia de prensa vespertina.

Este 6 de enero, el país tuvo los registros más altos de la pandemia de covid-19 en casos confirmados y defunciones: hubo 13 mil 345 contagios y mil 165 decesos en las últimas 24 horas.

Al ser cuestionado sobre cómo evitarán que la vacunación sea utilizada como un mecanismo electoral, pues algunas dosis se aplicarán en los mismos lugares donde se entregan apoyos sociales, el funcionario respondió que el Programa de Vacunación Universal es gratuito, siempre lo ha sido, y esta no es la excepción.

“Regularmente, el mecanismo por el que se entregan las vacunas en un momento normal es en los centros de salud o en plazas públicas, sin embargo, esta estrategia requiere de un cambio radical y es por eso que se toma la decisión de que se haga también a través de estos centros integradores de la Secretaría de Bienestar, donde la coordinación será a través de los siervos de la nación que son las personas que más conocen ese territorio, casi casi casa por casa y se tienen los datos específicos de un censo y se facilitan muchas cosas”, indicó.

Además, conforme vayan llegando más vacunas esto se realizará por otras vías, se necesitarán muchas estrategias, muchas manos para la aplicación de las vacunas.

“No es un mecanismo electoral, es un mecanismo de protección de las personas, público, gratuito, no habrá ningún intercambio más que el hecho de que una persona asista a la vacunación y se hará en todos los rincones de este país, a todas las personas mayores de 16 años, en todos los estados de la República”, destacó.

Además, explicó que el rango de edad se estableció por decenios de vida, por eso en una de las etapas dice mayores de 60 años, pero los primeros serán mayores de 80 años, luego de 70 a 79 y así sucesivamente.

“Y también dentro de cada grupo de prioridad, preferentemente, aunque es operativamente más difícil, a las personas que además de pertenecer a ese grupo de edad vive con alguna de las comorbilidades”, resaltó.

Respecto a la mortalidad en el sector salud por covid-19, destacó que, al corte que tienen registrado, de 2 mil 397 defunciones en personal de salud, el 61% eran del sexo femenino, hay una letalidad del 1.3%, y por profesión, la mayoría es de personal de enfermería: 40% mujeres y 18% hombres.

Los pobres pagan el mayor precio

En su oportunidad, el representante de OPS/OMS en México, Cristian Morales Fuhrimann, reconoció que para llegar a los umbrales necesarios para la protección contra covid-19 “se requerirá mucho tiempo y mucho esfuerzo”, pues la pandemia seguirá golpeando al mundo durante todo el año 2021.

“La mayoría van a ser casos leves, pero siempre vamos a tener aquellos casos que van a requerir hospitalización, quienes van a requerir intubación y quienes lamentablemente van a seguir falleciendo”, por lo que es importante que el personal de salud sea priorizado para la vacunación, señaló en la conferencia vespertina.

También valoró la idea de aplicar las vacunas a los grupos de mayor riesgo que son los adultos mayores y los adultos mayores con comorbilidades como hipertensión y diabetes, así como se empiece desde la periferia, desde las zonas remotas porque “son los pobres y eso no hay que olvidarlo, quienes han pagado el más alto precio en vidas humanas y sufrimiento por la pandemia de covid-19”.

Por eso, insistió, se debe proteger a las personas que están en mayor riesgo de vulnerabilidad, primero, tanto por razones sanitarias, como por razones sociales y de esa manera empezar con los grupos de edad, junto con los factores de riesgo, para que en un plazo relativamente corto, el primer semestre de 2021, se pueda abarcar el 20% de la población más vulnerable y disminuir en 80% la mortalidad.

“En ese sentido, valoramos de manera general este plan tal y como se está presentado, pero hay muchas cosas que todavía están por verse. Primero que nada, las vacunas. Tenemos en estos momentos una vacuna que se está aplicando, una vacuna que parece ser efectiva, segura y de calidad y así la Cofepris lo ha determinado para su uso de emergencia y otras van a llegar al país y van a alimentar esta campaña de vacunación a la que tenemos que comprometernos todos”, consideró.

Recordó que hoy día, sin vacuna, se puede romper la cadena de transmisión quedándonos en casa cuando hay semáforo rojo, lavándonos las manos frecuentemente, mantener la sana distancia y cuando no podamos hacerlo, usar el cubrebocas de tres capas, de tela o que se pueda reutilizar para ayudar además del bolsillo de la gente y al medio ambiente.

“Porque esta pandemia también tiene que ver con la intervención que hace el ser humano en el medio ambiente. Una intervención que ha sido durante muchos años descontrolada y que esta pandemia nos tiene que ayudar a entender que tenemos que ser más responsables”, reconoció.