CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), aseguró que esta institución usará toda su capacidad para proveer estímulos incluso si la economía de la zona euro empieza a mostrar señales de recuperación tras la crisis provocada por el coronavirus.
En conferencia de prensa en Fráncfort, Alemania, destacó que la recuperación de la economía de la zona euro ha comenzado a cobrar impulso en los últimos meses a medida que se han retirado las restricciones para contener la pandemia.
Sin embargo, exhortó a los líderes políticos a que lleguen con rapidez a un acuerdo ambicioso sobre el plan de apoyo para la recuperación del continente.
“Sigue siendo necesario un amplio estímulo monetario para apoyar la recuperación económica y salvaguardar la estabilidad de precios a mediano plazo. Por lo tanto, decidimos reconfirmar nuestra postura de política monetaria”, informó.
Tasas sin cambio
“Mantendremos las tasas de interés clave del BCE sin cambios”, resaltó Lagarde en la conferencia posterior a la reunión del Consejo de Gobierno del Banco.
En ese contexto, indicó Lagarde, el BCE continuará su iniciativa de 1.3 billones de euros (equivalente a 1.49 billones de dólares) que ha destinado para la compra de activos financieros, como parte del Programa de Compras por Emergencia Pandémica (PEPP, por sus siglas en inglés).
“A menos que haya sorpresas positivas importantes, nuestra previsión de base es que necesitaremos la totalidad del fondo PEPP“, sostuvo Lagarde.
En marzo pasado, el BCE anunció el PEPP por un importe de 750 mil millones de euros.
Estímulo amplio
Dos integrantes de la junta de gobierno del BCE, Isabel Schnabel e Yves Mersch, han sugerido la posibilidad de que no se inyecte la totalidad de recursos del plan de apoyo debido a que los mercados muestran signos de estabilización.
Lagarde sostuvo que el paquete de ayuda del BCE está funcionando y que aún se necesita un estímulo amplio para contrarrestar la incertidumbre creada por los esfuerzos para combatir el virus y mitigar el impacto económico.
“La información recibida desde nuestra última reunión de política monetaria a principios de junio indica una reanudación de la actividad económica de la zona del euro, aunque el nivel de actividad sigue muy por debajo de los niveles que prevalecían antes de la pandemia de coronavirus y las perspectivas siguen siendo muy inciertas”, remarcó la
economista francesa.
Detalló que las pérdidas reales y esperadas de empleo e ingresos y la incertidumbre excepcionalmente elevada sobre la evolución de la pandemia y las perspectivas económicas continúan afectando el gasto del consumidor y la inversión empresarial.
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