MÉRIDA, Yuc. (apro).- El confinamiento por la pandemia de covid-19 y los torrenciales aguaceros de la tormenta tropical ‘Cristóbal’ no detuvieron a comunidades mayas, académicos, ambientalistas y ciudadanos opositores al Tren Maya, a salir al encuentro del presidente Andrés Manuel López Obrador para reiterarle su rechazo al proyecto. “Otra vez se lo venimos a decir: no nos gusta que ustedes decidan por nosotros”, lanzaron pobladores mayas en una carta dirigida al mandatario. “Somos mayas yucatecos. Habitamos estas tierras desde antes de que ocurriera la invasión europea. Hemos vivido aquí por muchos siglos, cuidando nuestro territorio, nuestra agua, nuestros cultivos, nuestros animales. Este pedazo de la Madre Tierra ha sido nuestro sostén y aquí queremos que vivan y trabajen nuestros descendientes”. Sin hacer larga “la lista de agravios” recibidos durante los últimos dos siglos --de parte de quienes han querido arrebatarles su tierra y dignidad--, porque saben que López Obrador la conoce, dado que en sus discursos le han escuchado mucho hablar de historia, le reprocharon su intención de afectar sus territorios con el tren. “Nos hemos enterado que vienes a dar comienzo a los trabajos del llamado Tren Maya. Queremos decirte que la decisión de poner a funcionar un tren que pase por nuestros territorios se ha tomado sin nuestro consentimiento. “En realidad, no se trata solamente del tren: de la misma manera han decidido implantar gigantescas granjas sobre los cenotes, han talado y vendido montes para las energías del aire y del sol”, subrayaron. https://www.proceso.com.mx/632661/amlo-pone-en-marcha-obra-del-tramo-3-del-tren-maya-que-costara-mas-de-10-mil-mdp Y reclamaron al mandatario que en ninguno de esos proyectos se les tomó parecer a las comunidades indígenas afectadas. “En nada de esto nos han dejado participar. Le han preguntado, sí, a algunos ejidatarios y alcaldes municipales. Pero no todos los mayas trabajamos el campo, no hay muchas mujeres en el ejido, no todos los mayas votamos por los mismos partidos”, acusaron. Los mayas –recalcaron-- no son “solamente campesinos, o yucatecos, o pobres que necesitan empleos”, y aclararon al Ejecutivo: “Somos en primer lugar un pueblo originario, que tenemos derecho a tomar las decisiones en nuestro territorio, que queremos decidir nuestro propio futuro”. Y más: “Todos los proyectos que llegan, vienen ya hechos y quieren que digamos solamente que sí o que no, pero no nos permiten participar en la planeación, en la toma de decisiones. Piensan que somos ignorantes y que nuestra palabra no vale”. Entre otras cosas, también se quejaron de las “vueltas y vueltas” que se les hacen dar y los malos tratos que reciben cuando intentan recurrir a los instrumentos legales del Estado para plantear sus reclamaciones. “Como ahora que nos hacen dar vueltas y vueltas de uno a otro tribunal o juzgado. Y esto no ocurre solamente con los amparos que nosotros y otros pueblos hermanos hemos puesto contra el llamado Tren Maya, sino que sucede así siempre con todo lo que reclamamos”. Cuestionaron: “Después de muchos trabajos y gastos y vueltas, los juzgados terminan favoreciendo siempre a las empresas… ¿Y quieren que con estas leyes mal hechas se respete el derecho que tenemos como pueblo? Si no respetan nuestras formas de hacer justicia, ¿quieren que con estos juzgados tramposos resolvamos nuestros conflictos y administremos nuestros pueblos y nuestro territorio?”. Sobre el argumento de López Obrador de que el Tren Maya “es el pago de la ‘deuda histórica’ que el Estado mexicano tiene con los pueblos originarios” y que les dará empleos y desarrollo, soltaron: “Hoy que llegas a nuestras tierras queremos repetirte que nosotros no somos solamente pobres y campesinos. Somos un pueblo con derechos. La deuda histórica solamente van a poder pagarla cuando respeten nuestra dignidad de pueblo, cuando acaten los tratados internacionales que han firmado como Estado, reconociendo que es nuestro derecho participar en todas estas decisiones que otros están tomando sobre nosotros. “Dejen que nosotros definamos qué tipo de desarrollo queremos. Ha habido ya demasiado abuso contra nuestros pueblos y una gran devastación contra la Madre Tierra”. Y emplazaron al presidente de la República a que se siente con ellos a conversar sobre el Tren Maya, pues “ya es hora de hablar de eso”, de que les digan los riesgos y peligros, el uso de las ganancias del proyecto, la manera como las comunidades indígenas entrarán en su operación y administración. En otra misiva, pueblos mayas, académicos, ambientalistas y ciudadanos urbanos, organizaciones no gubernamentales, colectivos indígenas y populares, y comunidades de base, le recordaron a López Obrador su oposición al Tren Maya y le reclamaron su “inoportuna” visita a Yucatán “en medio de lo más crítico de la pandemia”. “En el discurso, la obra servirá para ‘detonar el desarrollo del sureste y potenciar el turismo y el desarrollo económico de la región’. Sin embargo, durante el avance del proyecto se han atropellado los derechos y garantías de la población y se ha violentado el Estado de derecho”, denunciaron. Le reclamaron la determinación de iniciar los trabajos, a pesar de que jueces federales han emitido diversos amparos para detener algunas de las actividades del proyecto, además de las medidas cautelares que impuso la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, por lo que su visita atenta “contra el orden constitucional” y afecta “el delicado balance y el equilibrio del ejercicio de poder en nuestro país”.