CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La pandemia de covid-19 llegó hasta la zona de plataformas marinas de la Sonda de Campeche, donde un buque con 180 personas a bordo fue puesto en cuarentena, luego de confirmarse que 10 de ellas dieron positivo al patógeno.
Se trata del Blue Pioneer de la compañía naviera Subsea 7 México, que presta servicios de apoyo a las plataformas petroleras. Las 10 personas contagiadas son originarias de Tabasco, Jalisco, Puebla, Veracruz y Tamaulipas, quienes por motivos laborales se encontraban en el municipio de Carmen.
De acuerdo con un oficio de la Capitanía de Puerto Regional, firmado por su titular, Ildefonso Carrillo Mora, el barco de bandera mexicana fue enviado a guardar la cuarentena en un “fondeadero seguro” a 14 millas náuticas de Isla del Carmen y 14 metros de profundidad, donde no obstaculiza “el paso inocente de los buques ni el tráfico marítimo”.
En esa nota informativa a sus superiores, el capitán de puerto explica que el brote comenzó con un cocinero y un inspector de Petróleos Mexicanos, el primero ya confirmado como positivo y el segundo considerado aún por las autoridades sanitarias como caso sospechoso.
Añadió que ante esa situación inició el operativo sanitario de revisión a bordo del buque, que estuvo a cargo de tres médicos y dos enfermeros que tomaron 22 muestras a personas con síntomas de problemas respiratorios, de las cuales 11 se enviaron al Laboratorio Estatal de Salud Pública a la capital del estado y las restantes al IMSS de Ciudad del Carmen.
De las primeras 11, diez resultaron positivas a covid-19. Sólo un caso dio negativo.
El funcionario adelantó que “en breve seguramente bajarán a un tripulante con cuadro respiratorio agudo con saturación de oxígeno y será trasladado al área de conversión del IMSS” en la isla, y la embarcación queda en cuarentena.
La Secretaría de Salud informó que, con esos 10 casos confirmados, el acumulado de casos positivos en la entidad se elevó a 29 y dos defunciones.
Codhem inicia 52 quejas
En el Estado de México, en lo que va de la jornada nacional de sana distancia para evitar contagios por covid-19, la Comisión de Derechos Humanos (Codhem) ha iniciado 52 quejas por la supuesta acción u omisión de autoridades municipales y estatales, la vulneración de personal médico y de personas privadas de su libertad, y por violencia de género contra niñas y mujeres.
La Primera Visitaduría General tiene registrados 37 expedientes relacionados con posibles violaciones de derechos humanos relacionadas con la pandemia, de los que 17 corresponden a acciones u omisiones de autoridades municipales, cinco de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, cuatro de la Fiscalía General de Justicia estatal, tres del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) y dos de la Secretaría de Educación estatal.
Además, se promovieron quejas contra los Servicios Educativos Integrados del Estado de México (SEIEM), la Dirección General de Prevención y Reinserción Social, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Órgano Superior de Fiscalización (OSFEM), la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de México y la Inspección General de las Instituciones de Seguridad Pública del Estado de México (IGISPEM), a razón de una contra cada dependencia.
También fueron abiertos cuatro expedientes por vulneración a los derechos humanos de personal médico y de enfermería, y una investigación de oficio contra los directores de los centros de prevención y reinserción social de la entidad por afectar el derecho a la protección de la salud de personas privadas de la libertad con la falta de médicos, medicamentos y políticas de salud en los penales mexiquenses.
Por la vulneración de los derechos humanos del personal médico y de enfermería, la Codhem inició dos expedientes contra el ISEM: uno porque el Hospital General de Atlacomulco no se apegó a las buenas prácticas de la administración pública al proporcionar atención sin contar con el equipo sanitario adecuado, y el otro porque en el Centro de Salud San Antonio Buenavista el personal médico no recibió los insumos necesarios para atender a las personas con síntomas de coronavirus.
Otra más porque presuntamente en el Hospital Regional Toluca del ISSEMyM no se respetaron las medidas de contingencia implementadas para evitar la propagación del virus entre las madres de menores, mujeres embarazadas y personas adultas mayores, a pesar de informar que se habían girado los oficios para atenderlas, mientras que el Instituto Materno-Infantil del Estado de México afectó el derecho a la seguridad e higiene en el trabajo al no respetar las medidas preventivas, pues el quejoso refiere que a pesar de tener 60 años de edad lo hicieron trabajar durante la contingencia, por lo que tuvo que pedir vacaciones adelantadas.
De igual manera, se iniciaron 10 quejas por violencia de género en el ámbito familiar, lo que atenta contra los derechos a la igualdad y al trato digno, a la integridad y seguridad personal, al trabajo, a la legalidad y la seguridad jurídica.
En tanto, la Secretaría de Seguridad del Estado de México reconoció cinco casos positivos al virus en el penal de Cuautitlán (un custodio y cuatro internos), de 23 personas privadas de la libertad sospechosas que fueron trasladados al penal de Nezahualcóyotl Norte para facilitar su cuarentena; todos los casos, a decir de la autoridad, muestran síntomas leves.
El Estado de México cerró el fin de semana con 523 casos positivos al virus SARS-CoV-2, de los que 197 han sido dados de alta sanitaria, 146 están en aislamiento domiciliario, 156 hospitalizados y se han registrado 24 decesos. Además, hay 693 casos sospechosos en análisis y mil 671 han sido negativos.
En la UABC, 18 infectados
En Baja California, luego de que el gobernador Jaime Bonilla hizo un llamado a los estudiantes de medicina de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) a regresar a los hospitales para atender casos de covid-19, se dio a conocer que 18 están infectados y otros 29 esperan el resultado de las pruebas.
El pasado 7 de abril, el rector de la UABC, Daniel Valdez Delgadillo, dio la orden de que los mil 150 estudiantes de enfermería y medicina salieran de los hospitales del estado debido a que no contaban con las medidas de protección suficientes y no había insumos para apoyarlos en todo momento.
En Baja California hacen falta médicos y enfermeras debido a que varios se han contagiado del coronavirus, entre ellos el director del Hospital General en Mexicali, Edgar Castillo López, y en su lugar se nombró como encargado al doctor Diego Ovalle Marroquín, quien era director de Calidad y Educación en Salud.
Cuando el gobierno del estado lanzó la convocatoria para que estudiantes, pasantes e internistas de la UABC apoyaran en la crisis sanitaria, el gobernador Jaime Bonilla y el secretario de Salud, Alonso Pérez Rico, dijeron que aquellos estarían atendiendo teléfonos orientando a la gente que considerara tener los síntomas, y solo los que ya estaban en sus internados darían consultas físicas en los nosocomios.
El 7 de abril, la rectoría emitió un comunicado donde informó: “la UABC retira de prácticas e internado a todos sus estudiantes que actualmente prestan servicio en instituciones del sector salud, efectivo a partir de hoy 7 de abril y hasta el 30 de abril de 2020, salvo nueva disposición.
“Lo anterior considerando la etapa actual de emergencia sanitaria por covid-19 y anteponiendo la seguridad de los cimarrones y sus familias”.
La periodista Erika Gallegos reportó este día que el rector Daniel Valdez Delgadillo le reveló que ha “intentado contactar al gobernador del estado para platicar sobre el tema” pero no ha tenido éxito.
"Se consideró que era importante que quienes ya cuentan con experiencia profesional y no académica fueran los pasantes en esta etapa, esto se trató de platicar con el gobernador y se le intentó contactar, pero no hubo éxito", dijo el rector a la reportera Erika Gallegos.
Por otro lado, a un mes del primer caso confirmado en Quintana Roo y con más de 250 “positivos” y dos docenas de muertes, el gobierno del estado endureció la “cuarentena” para mitigar la propagación del covid-19, con retenes y cierre de avenidas y la clausura de comercios en Cancún, que se ha convertido en el epicentro de la enfermedad en el estado, con aproximadamente 75% de los contagios.
“Por instrucciones del señor gobernador (Carlos Joaquín) y en acuerdo con el gobierno municipal de Benito Juárez y la presidenta (municipal) “Mara” Lezama, vamos a generar una serie de acciones muy determinantes”, anunció al mediodía en redes sociales el titular de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública, Alberto Capella Ibarra.
Elementos de la llamado Policía Quintana Roo colocaron retenes y filtros alrededor del primer cuadro de la ciudad para inhibir el trasladado de personas en automóviles.
De igual forma, el propio Capella encabezó un operativo en la populosa zona del “El Crucero”, en el centro de la ciudad, para exigir el cierre de comercios, con la amenaza de clausurarlos.
Por la tarde, el gobernador Carlos Joaquín reconoció en un “video mensaje” que Quintana Roo entró en la fase de “propagación masiva” ante lo que calificó una “pandemia inclemente”, y anunció la aplicación de “medidas más severas” para “salvar vidas”.
En Jalisco, a pesar del llamado de la autoridad para permanecer en casa, con el fin de evitar la propagación del covid-19, ayer fueron revisadas 15 mil 197 personas en los siete filtros sanitarios que se instalaron en las salidas a carretera.
Las personas iban en sus vehículos --algunos todo terreno-- y llevaban consigo maletas, mascotas y bicicletas para tomar vacaciones, aunque en Jalisco los servicios turísticos se encuentran cerrados.
Desde el pasado 3 abril se instalaron siete filtros sanitarios en las salidas a carretera que conectan a la playa y montaña, y hasta el momento se ha revisado a 96 mil 843 personas, a quienes se les toma de temperatura. Además, se les aplica un cuestionario y se les regala gel antibacterial.
Según la Secretaría de Salud Jalisco, no se ha detectado ninguna persona con síntomas de enfermedad respiratoria.
(Rosa Santana, Veneranda Mendoza, Jesusa Cervantes, Sergio Caballero, Gloria Reza)