CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente del Tribunal Universitario, Eduardo López Betancourt, refutó las declaraciones de Lourdes Ojeda Serrano, quien el pasado martes 11 lo interpeló y denunció por acoso. El académico aseguró que nunca antes había visto a la mujer.
En una carta dirigida al director de la revista Proceso, Jorge Carrasco Araizaga, López Betancourt afirma que el señalamiento de Ojeda, a quien identificó como directora jurídica de la Comisión de Presupuestos de la Cámara de Diputados, es “fantasioso y ridículo”.
“Aclaro (…) que jamás la había visto, sino hasta el pasado martes 11 de febrero, en que aproximadamente a las 18:30 horas interrumpió un evento académico para lanzarme un sinnúmero de amenazas e infundios, entre los cuales señaló que era un secuestrador, asesino y hasta genocida”.
López Betancourt también precisa que cuenta con testigos y pruebas que confirman que jamás había visto a la mujer, y que las acusaciones de Ojeda Serrano, quien –subraya-- es esposa del diputado federal Javier Uriel Aguirre Velazco, son “una cortina de humo” para ocultar el verdadero conflicto que recientemente denunció.
Ayer, la UNAM emitió un comunicado donde descalificó las declaraciones de Lourdes Ojeda Serrano, pero el catedrático insistió en acusar a Morena de estar detrás de los ataques en su contra:
“Preciso y señalo de manera directa la intromisión del diputado con licencia y presidente interino de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, de intervenir en los asuntos internos de la UNAM”, sentencia. Y atribuye la intervención al manejo del presupuesto federal que se otorga a la institución académica.
Tras insistir en las intenciones de Ramírez Cuéllar de controlar la UNAM, asegura que este punto de vista lo ha llevado a tener discusiones e intercambiar correspondencia con Enrique de Val Blanco, presidente de Planeación de la Universidad, y con el propio rector, Enrique Graue Wiechers. Incluso –abunda-- con personajes de Morena como John Ackerman y el coordinador de senadores de esa bancada y profesor de la Facultad de Derecho, Ricardo Monreal Ávila.
“Todos ellos son testigos de mis señalamientos, y por supuesto entiendo el riesgo que implica alzar la voz ante las injusticias, no sólo con descalificaciones que he sufrido, sino contra mi familia y patrimonio”, expresa en el documento membretado con el escudo de la UNAM.
Finalmente, López Betancourt califica como una “venganza burda” las acusaciones de Ojeda Serrano, colaboradora de Alfonso Ramírez Cuéllar, y asegura que se trata de una estrategia vil, llena de calumnias y oprobio.
“Al margen de este melodrama del binomio Ramírez-Ojeda, ratifico de manera contundente: EL GRUPO QUE COMANDA ALFONSO RAMÍREZ CUELLAR EN MORENA, DEBE SACAR LAS MANOS DE LA UNAM (sic)”, concluye.
[caption id="attachment_617982" align="aligncenter" width="2104"] Postura de Eduardo López Betancourt[/caption]
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