CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Para el presidente Andrés Manuel López Obrador, el feminicidio es “fruto podrido del neoliberalismo”; las causas que lo originan son las mismas que las del homicidio en general y, como la principal, destacó, la falta de oportunidades para la juventud durante 36 años de abandono.

“Toda la violencia que se padece en el país contra mujeres y hombres, es fruto podrido de un modelo económico, materialista, inhumano, que se impuso durante el período neoliberal”, dijo, aunque reconociendo que sí hay machismo en la violencia.

Fue la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ponente estelar del ejercicio de comunicación política presidencial, quien le enderezó la plana, al advertir que las causas del feminicidio “concretamente, no son las mismas que las del homicidio violento contra una mujer por distintas razones”, en un intento de clarificar conceptos.

En el contexto del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el gobierno de la República dedicó la mayor parte de la conferencia de prensa presidencial a ofrecer un informe sobre las políticas públicas en la materia que, entre datos de reconocimiento al incremento en la incidencia de asesinatos de mujeres y proclamas de autoadscripción feminista, destacó por la presencia de las mujeres integrantes del gabinete que el mandatario ha intentado mantener paritario.

Las cifras 

La semana pasada, el encargado del despacho de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, informó de un incremento en los feminicidios, por el orden de 1.5%. Hoy, Sánchez Cordero lo puso en términos más concretos:

Cada día, 32 niñas de entre 10 y 14 años en el país se convierten en madres; cada año son asesinadas 3 mil 800 mujeres, niñas y adolescentes… y, en general, seis de cada diez mujeres han sufrido algún tipo de violencia; ocho de cada diez sienten temor de ser agredidas física o verbalmente al transitar por las calles.

El asunto se ha convertido en el principal problema político-social para el gobierno de López Obrador, al que colocó en una posición difícil debido a los desatinos declarativos presidenciales sobe el tema y la falta de resultados en investigaciones que, hasta marzo, se había expresado en movilizaciones por todo el país y, en eso llegó la pandemia.

La coordinación del tema con diferentes dependencias públicas fue asumida por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien desde hace tiempo insiste en que “la Cuarta Transformación” es feminista, una expresión que reiteró esta mañana, para luego anunciar 16 días de activismo gubernamental y expresar las consignas pertinentes:

Que “el machismo mata”, que “destruye la vida de las mujeres”, que “limita el desarrollo del país” y, en la misma línea discursiva, que “es momento de decir basta de feminicidio, basta de violencia política por razones de género”.

Más allá de la retórica, el repaso de diferentes programas y políticas públicas implementados o por continuidad en la atención del flagelo, corrieron a cargo de la propia Sánchez Cordero, así como de Nadine Gasman, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres.

Destacadamente, Sánchez Cordero explicó las mesas de justicia y la coordinación con diferentes dependencias para avanzar en la indagatoria de feminicidios con las fiscalías, cuyos resultados serán dados a conocer cada mes.

“Esta administración pasará a la historia comprometida con la igualdad, aquí hay una muestra de ellas, todas y todos formamos parte de este proyecto y no dejaremos a nadie atrás ni a nadie afuera”, dijo la titular de Gobernación.

Y es que la presencia de las titulares de dependencias y entidades del gabinete legal y el ampliado, e inclusive de la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, apuntaló las expresiones sobre la inclusión de la actual administración de las mujeres en la toma de decisiones y, todas juntas, con el presidente López Obrador, posaron para la foto al concluir el acto.