CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La desaparición del Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas “podría poner en peligro la vida y la seguridad de los periodistas”, ante las complicaciones burocráticas y administrativas para la implementación de medidas de protección, consideró Emmanuel Colombié, director de la oficina de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en América Latina.

Luego de que el Senado de la República confirmó la desaparición de 109 fideicomisos, como lo hizo previamente la Cámara de Diputados, la organización lamentó la medida, pese a su alerta sobre las desventajas de la desaparición del Fondo, sobre todo porque, subrayó, “México sigue siendo uno de los países más mortíferos del mundo para los periodistas”.

Tras recordar que los responsables del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas reconoció el 28 de septiembre que la desaparición del Fondo implicaría “la pérdida de flexibilidad” para adoptar medidas urgentes, RSF destacó que ha recabado “numerosos testimonios de los preocupantes beneficiarios del Mecanismo, y en particular de familiares de periodistas víctimas de desplazamiento forzado que se han refugiado sobre todo en la Ciudad de México, cuyo futuro se encuentra en la incertidumbre a partir de ahora”.

“El presidente (Andrés Manuel) López Obrador y el Ministerio del Interior (Secretaría de Gobernación) deben comunicar lo antes posible de qué manera se van a reemplazar las atribuciones de este Fideicomiso, además de garantizar que los recursos destinados al Mecanismo se mantendrán y gestionarán con total transparencia”, apuntó Colombié.

Para RSF, la desaparición del Fideicomiso “complicará aún más los trámites administrativos para implementar las medidas de protección, además de generar una mayor carga burocrática que potencialmente podría poner en peligro la vida y la seguridad de los periodistas bajo protección o de quienes lo soliciten en adelante”, aunado a que se teme “que se produzca una mayor opacidad con respecto al uso de los fondos asignados al Mecanismo”.

El director regional de RSF puntualizó que siendo México uno de los países donde los periodistas corren mayores riesgos en el mundo, “es inconcebible que esta votación pueda debilitar el Mecanismo y que se ponga en peligro a sus beneficiarios”.

Ante los riesgos reales contra los trabajadores de medios de comunicación, Colombié urgió a las autoridades mexicanas a “crear lo antes posible un nuevo sistema transparente y eficiente que permita al Mecanismo cumplir con su mandato con prontitud y a largo plazo, además de tomar con seriedad en esta nueva etapa las recomendaciones de las organizaciones defensoras de la libertad de expresión”.

Resaltó que actualmente el Mecanismo cuenta con mil 304 beneficiarios, de los cuales 418 son periodistas, 111 mujeres y 307 hombres, en tanto que 886 son defensores de derechos humanos, 471 mujeres y 415 hombres.

La organización con sede en París, Francia, destacó que en noviembre del año pasado una coalición de organizaciones de defensa de la libertad de expresión se reunió con el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, quien se comprometió a implementar las 104 recomendaciones que le hizo la oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, emitidas en julio de 2019 “con el fin de mejorar el funcionamiento del Mecanismo.

El director de RSF en América Latina advirtió que entre las recomendaciones se destaca “la necesidad de que el Estado garantice e incremente los recursos humanos y materiales necesarios para el buen funcionamiento del Mecanismo”, pero hasta ahora “las autoridades mexicanas no han tomado ninguna decisión concreta desde entonces”.

Mientras tanto, la organización ha documentado “al menos 15 asesinatos en relación directa con su trabajo de información desde que comenzó el mandato del presidente López Obrador”, cinco de las víctimas han sido asesinadas en 2020, “lo que convierte a México en el segundo país más peligroso del mundo para la prensa, por detrás de Irak, donde se registraron seis casos”.

Finalmente, destacó que, de acuerdo con la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, publicada en 2020, México ocupa el lugar 143 de 180 países.