CIUDAD DE MÉXICO (apro).—El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que se terminaron los tiempos en que el secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) era “su alteza serenísima”  al cual se le rendía pleitesía para que entregara las participaciones federales a los estados. En su conferencia de prensa matutina, el mandatario señaló:

“Durante algún tiempo llegó a ser más importante el secretario de Hacienda que el secretario de Gobernación, porque era el que entregaba el cheque de las participaciones, el de Hacienda; y podría demorar la entrega o no entregar completo o cobrarse adeudos, que los hay, por ejemplo, en el pago de impuestos”.

Agregó que “por eso el secretario de Hacienda era el equivalente a ‘su alteza serenísima’, se le rendía pleitesía. Ahora no. Arturo (actual secretario de Hacienda) es un servidor público, Arturo Herrera, un ciudadano, lleva muy buena relación con los gobernadores y a todos se les atiende, es su derecho”. López Obrador de plano dijo que no se requiere estar haciendo antesala o cabildeo o implorando al secretario de Hacienda que entregue los recursos. El tabasqueño aclaró que “no hay queja” en la entrega de las participaciones a las entidades federativas.

“Ustedes saben que hay un acuerdo de coordinación fiscal donde la federación recauda, los estados aceptaron esto mediante un convenio, es decir, aceptaron que asumiera la federación el cobro de los impuestos y que mediante una fórmula se le regresara a cada entidad lo que les corresponde. Bueno, eso se cumple sin demora, no hay una sola queja”.

Esto debe de quedar muy claro, agregó, la federación cumple con entregar las participaciones que corresponden a los estados y a los municipios.

“No hemos dejado de cumplir entregando la cantidad que legalmente le corresponde a cada estado, a cada municipio y a veces hasta se les ha adelantado el monto de las participaciones, o sea que estamos al día. Eso es lo que por ley le corresponde a cada estado, a cada municipio”, explicó.

El presidente destacó la labor de Banobras en cuanto a la reestructuración de deudas en estados y municipios. Profundizó:

“Las finanzas de los estados y de los municipios en algunos casos quedaron muy comprometidas porque se llevaron a cabo programas de construcción de obras con cargo a las participaciones federales y se endeudaron los estados, no todos”.

Matizó que “sí hay problemas financieros en estados, en municipios, que tienen que estar pagando de sus participaciones por obras que se hicieron, que costaron mucho, porque no sólo elevaron los precios de las obras, sino que fueron obras financiadas mediante mecanismos no muy transparentes ni muy favorables a la hacienda pública”.