CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Por falta de pruebas, el Sexto Tribunal Unitario del Estado de México ordenó la libertad de Valentín Cárdenas Lerma, preso en el penal de alta seguridad del Altiplano por la fuga de Joaquín El Chapo Guzmán, hace tres años. La magistrada Olga María Josefina Ojeda Arellano, titular del Sexto Tribunal Unitario del Segundo Circuito, ordenó la libertad del exfuncionario “por falta de elementos para procesar”, a pesar de que la Procuraduría General de la República (PGR) le imputó el delito de evasión de presos. La defensa del exfuncionario da por hecho que la PGR interpondrá una revisión en contra de la sentencia, pero considera que el fallo de la magistrada se sostiene porque el Ministerio Público federal no pudo probar sus acusaciones. En su resolución, publicada el martes, la magistrada le ordena al Quinto Tribunal Unitario del Segundo Circuito, con sede en el Estado de México, dictar el auto de libertad bajo el argumento principal de que Cárdenas Lerma no se encontraba en el penal al momento de la fuga. El 11 de julio de 2015, el penal estaba a cargo de Leonor García García, quien era la directora jurídica del Cefereso número 1. Ella también fue detenida, pero obtuvo su libertad por falta de elementos. A pesar de que la seguridad de El Chapo Guzmán estaba a cargo del órgano administrativo encargado de las prisiones federales, el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y la Policía Federal (PF), la PGR centró sus acusaciones en funcionarios de mediano nivel como Cárdenas Lerma, y en los agentes del Cisen y de la PF encargados del monitoreo de Guzmán Loera, preso ahora en Estados Unidos en espera de juicio. En febrero pasado, en su edición 2153, Proceso publicó que el encargado de inteligencia de la PF al momento de la fuga, Ramón Eduardo Pequeño, declaró ante el Ministerio Público que en varias reuniones de trabajo Cárdenas Lerma insistió en que El Chapo debía ser cambiado de celda.