Unido al movimiento de la Nueva Trova Cubana desde 1972, el cantautor Virulo presenta su nuevo espectáculo de sátira musical A gozar que el mundo se va a acabar, la noche del sábado 2 de diciembre en el Teatro del Parque de Interlomas. Artista habanero que intercala su carrera entre Cuba y México, Virulo suelta ráfagas de simpatía acre: “El humor sirve a la gente para que pierda el miedo. En mi espectáculo hablo de los sismos, los huracanes, las figuras políticas, de Donald Trump, Fox, Peña Nieto y todo lo que provoca un estado de constante desasosiego en la población.”  CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- El cantautor y humorista Alejandro García Villalón, alias Virulo, es implacable en su apreciación sobre las figuras políticas, y acerca de Donald Trump, entre risas burlonas, dice: “Es el único individuo en el mundo que si le da Alzheimer, le sube el coeficiente de inteligencia.” Del expresidente Vicente Fox comparte que “no es mala persona”, pero sí “un poco pendejo”. En Enrique Peña Nieto ve a “uno de los peores presidentes que ha tenido el país” y los dirigentes cubanos no se salvan de su escrutinio: “Creo que algunos han hecho un daño terrible porque se han acostumbrado a tener la razón y no es así. Deben tener un oído más fino para escuchar lo que dice la gente”. Habanero de nacimiento (enero 5 de 1955) y mexicano por elección, Virulo presentará el espectáculo A gozar que el mundo se va a acabar en el Teatro del Parque de Interlomas, el próximo 2 de diciembre. Entrevistado por Proceso, el fundador del movimiento de la Nueva Trova Cubana, comparte algunas pinceladas de su presentación: “Estoy convencido de que el humor tiene que servir a la gente para que pierda el miedo. Vivimos en una sociedad donde todo el mundo vive con temor. Una manera de perderlo es justamente riendo de las desgracias, ya sean políticas, naturales o culturales. En mi espectáculo hablo de todas ellas, de los sismos, los huracanes, las figuras políticas y todo lo que provoca un estado de constante desasosiego en la población.” –¿Reír para no llorar, Virulo? –¡Así es! Por eso digo: ¡A gozar que el mundo se va a acabar! El humor funciona como un alivio muy grande de las presiones a las que uno está sometido. Creo que el humor es necesario en las épocas de crisis porque hace que la gente sobreviva a estos desastres. Gusanada rubia De larga melena plateada y acento inconfundible, Virulo pide un daiquirí en el restaurante de Coyoacán donde se realiza la entrevista. Sus frases cargan fuego y humor al mismo tiempo: “Fíjate que lo primero que surge cuando hay una desgracia natural son los chistes, igual cuando hay una desgracia política, como la llegada de Donald Trump. Yo creo que no hay un tipo que haya sumado tantos chistes en tan corto tiempo como Trump.” –O sea, ¿los políticos son humoristas involuntarios? –Sí, los políticos a veces nos ayudan a hacer nuestro trabajo. Donald Trump es el único individuo en el mundo que si le da Alzheimer le sube el coeficiente de inteligencia. Una venganza social muy bonita del pueblo mexicano la detecté en Chihuahua: descubrí un balero con la figura de Trump ¡Imagínate, está sensacional! ¡Literalmente ensartan a Donald Trump! Yo digo en el espectáculo que parece que el presidente lo siente, porque siempre se la pasa encabronado… –¿Terminará su periodo? –Muchos apuestan a que no. En Times Square pusieron un reloj que cuenta los minutos que le quedan en la presidencia. Virulo relata que hace unos días viajó con su familia a Veracruz y que en el Museo de Cera del puerto se tomó una fotografía de cuerpo entero con la efigie del presidente norteamericano. Pero no fue una foto cualquiera. La imagen muestra al artista levantándole el dedo medio justo frente a la mirada altiva y prepotente de Donald Trump. El humorista subió la foto a Facebook y eso provocó una avalancha de ataques de los cubanos de Miami. –¿Te lincharon en las redes? –¡Me lincharon! ¡Me cayeron con todo! –¿Por qué lo defienden en Miami? –¡Por imbéciles! Porque yo creo que finalmente son unos oportunistas, siendo cubanos se sienten gringos, y en el fondo están dispuestos a traicionar a su gente. Por eso nunca van a poder cambiar nada en Cuba. Porque ellos se fueron pa’ Estados Unidos e inmediatamente se sintieron gringos. Yo creo que todos esos cubanos que defienden a Trump lo hacen por oportunismo político. Un tipo que lo defiende con esa vehemencia tiene que ser un imbécil. Políticos mexicanos y cubanos Se le cuestiona su opinión sobre el presidente Enrique Peña Nieto. “Peña Nieto es, me atrevo a decirlo y esto lo piensa una buena parte de la población mexicana, de los peores presidentes que ha tenido el país, de los de menos aprobación pública. Es un hombre comprometido con grupos económicos muy fuertes y eso, lejos de beneficiar a la población, la ha perjudicado. “Vicente Fox tiene muchas frases inolvidables. Al ganar las elecciones presidenciales, dijo: ‘Cuando asumamos el poder vamos a hacer que el país dé un giro de 365 grados’. Y la gente aplaudía, y bueno, yo digo, una vuelta de 360 grados le das vuelta en redondo y caes en el mismo sitio; pero como que quiso meterle más galleta, se puso 365 grados y cayó más a la derecha.” –¿Qué hay de Calderón? –No dijo tanta barrabasada. Lo que dejó Calderón fue una guerra y una cantidad de muertos espantosa. La época de Calderón fue realmente trágica. –¿Se parecen los políticos mexicanos y los políticos cubanos? –Tienen sus puntos. Un problema de los políticos de todas partes es que se creen dueños de la verdad absoluta. Yo creo que uno de los problemas más graves de los políticos cubanos y lo que ha llevado a Cuba a muchos de los problemas que hoy tiene es la falta de discusión real. Creo que esto ha hecho un daño terrible, porque los políticos cubanos se han acostumbrado a tener toda la razón y no es así. Deben tener un oído más fino para escuchar lo que dice la gente, lo que piensa la gente. Sabor tragicómico Arquitecto de profesión, Virulo inició su carrera musical en 1972 en la Nueva Trova junto a Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Noel Nicola, Amaury Pérez y Sara González. En su país obtuvo el Premio Nacional del Humor hacia 2014. –¿El humorista favorito de todos los tiempos para Virulo? –Mark Twain. Lo admiro profundamente, porque creo que una de las peculiaridades que debe tener el humor es sacar lo mejor de nosotros mismos y hacernos de algún modo regresar a la infancia. Yo creo que cuando el hombre se ríe, cuando puede regresar a ser niño con la risa, es un hombre que encuentra la felicidad nuevamente. “Y es que resulta tan aliviador el humor porque nos regresa a nuestra infancia, como decía Freud; a la época en la que no estábamos presionados ni aplastados por las regulaciones morales del mundo, ni con las regulaciones morales de la sociedad. De alguna manera el humor nos lleva de nuevo a ser niños y a liberarnos de esas trabas.” –¿Algún mexicano en tu lista? –Jorge Ibargüengoitia, me parece estupenda su ironía. Me encanta el humor de Jis y Trino. Me encanta la tipografía, los diseños de las caricaturas y sus historias muy locas. El Santos me parece que es un hito en el humor gráfico mexicano. –¿Y en el cine? –Cantinflas y Tintán de la Época del Cine de Oro. El humor moderno que se ha hecho en el cine no ha sido tan acertado como el suyo, El Ceniciento me parece una película extraordinaria, es mi favorita. –¿Qué es el humor, Virulo? –Decía Wenceslao Fernández Flores, el humorista y escritor español, que el humor era un rostro sonriente al que asomaba una lágrima. El humor siempre tiene un sabor tragicómico, amargo porque habla de las cosas que quizás no queremos ver. “El humor siempre tiene un compromiso y siempre de alguna manera toma partido. Por eso no todos los cómicos son humoristas, y todos los humoristas son un poco cómicos.” Virulo posee una discografía con más de 20 producciones. En Juegos Sinfoniquísimos, grabado en vivo con la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, participó Ernesto Acher, exintegrante de Les Luthiers.    Este reportaje se publicó el 26 de noviembre de 2017 en la edición 2143 de la revista Proceso.