Adiós a Gleen Frey de The Eagles, coautor del 'Hotel California”

lunes, 25 de enero de 2016 · 23:08
MÉXICO, DF (apro).- “Es con el dolor más pesado de nuestros corazones que avisamos la muerte en Nueva York, el lunes 18 de enero de 2016, de Glenn Frey: esposo, el mejor de los amigos, padre, camarada y fundador del conjunto Eagles”, anunciaron sus familiares Cyndy, Taylor, Deacon y Otis Frey en la página del conjunto angelino que dieran a conocer la pieza “Hotel California”, allá por 1977. “Glenn sostuvo una lucha bravía durante muchas semanas, pero desgraciadamente fue derrotado por complicaciones de artritis reumática con colitis ulcerada y neumonía”, agregó la noticia signada asimismo por los músicos de la banda Don Henly, Joe Walsh, Timothy B. Schmit, y Bernie Leadon: “La familia Frey desea agradecerles a todos aquellos quienes lo apoyaron en enfrentar esta batalla, al tiempo que anhelaron su recuperación y rezaban por él. No hay palabras para describir nuestra pena, ni tampoco nuestro amor y respeto por todo lo que brindó a su familia, a la comunidad musical y a sus fans en el mundo entero.” A continuación, incluyeron la letra de su baladita con aires mexicanos de trompetas mariachi “El mundo es ahora tuyo” que cierra el álbum doble y séptimo de Eagles, Long Road Out of Eden (“Un largo sendero lejos del Paraíso”, 2007), pieza de Gleen Fray y Jack Tempchin:
Un día perfecto, el sol se hunde al ocaso;         mientras llega la noche, las suaves brisas soplan.         El tiempo que compartimos se fue tan veloz         y como en un sueño, por lo cual sabíamos que no duraría.          Pero todo lo haría de vuelta si de algún modo yo pudiera;         aunque pronto deba retirarme, tuyo es el mundo ahora.         El mundo es ahora tuyo, la carrera ha acabado para mí.                 Mi movimiento se asemeja al del sol en el ocaso.         Que no haya tristes despedidas, las lágrimas están prohibidas.          Tú vas a estar bien, tuyo es el mundo ahora.                Pese a que la distancia nos separe, te llevará siempre mi corazón.         A la hora en que nubes de tinieblas aparezcan en el cielo,         recuerda que el amor verdadero permanece para siempre.         Solamente antes de partir: un beso, un vaso de vino,         y bailemos una pieza mientras tengamos tiempo.          Mi última voluntad es que algún día te des cuenta         de cuánto me esforcé por ti, ya que significas tanto para mí.           El mundo es ahora tuyo. Aprovecha bien tu tiempo,         únete a una buena causa y deja algo bueno a los demás.         Cae el telón, me despido con una reverencia.         Pasó lo que tenía que pasar, el mundo es ahora tuyo.         El mundo es ahora tuyo. El mundo es ahora tuyo.
(ver http://www.eagles.com/news/266763)   Bienvenidos al Hotel California La primera grabación que conocí de Eagles fue The Long Run, casete de 1979 (que mi padre periodista del Excélsior de Julio Scherer me obsequió tras uno de sus múltiples viajes al extranjero para cubrir eventos deportivos). Aquella grabación de 10 cortes es buena. Contiene rock suave fusionado con country folk y giros de soul que han sobrevivido la prueba de casi 40 añejos: Eagles sonaban cual émulos de otro conjunto en la psicodelia californiana de los setentas: Redwing). Ahí están la cadencia súper del tema titular “La carrera larga”, la nostálgica “No puedo decirte por qué”, las danzarinas “En la ciudad” y “Disco Stangler”; un intrigante “Rey de Hollywood”, la pegajosa “Qué lata esta noche”, la cachondona “Esos zapatos”, los blues de “Prisión juvenil”, la muy bailable “A los griegos no les laten los friquis”, y la bonita “El café de la tristeza”. ¡Ni una mala, caray, así se la gastaban estos aquilinos! Fue hasta después que di con el LP Hotel California, de 1976, cuyo famosísimo corte trascendió hasta nuestros días: “Hotel California” es una canción de Fray, Henley y Felder que sin embargo, copiaba pasajes de acordes a una canción original de Jethro Tull: “Solíamos saber”, compuesta por Ian Anderson para su genial disco Stand Up, de 1969. Cuando luego del llamado “Eclipse del siglo” en 1991 me quedé hechizado meses por el Mar de Cortés, en Baja California Sur, me di cuenta de la tremebunda popularidad de Eagles en Las Varitas Classic Rock & Bar de La Paz: ahí sonaba una versión notable del Poncho Varitas, la rubia de categoría Samantha Byers y su banda Somos, adaptación lírica a aquel legendario antro.
Sobre una carretera de tinieblas en el desierto,          con el viento helado sobre mi pelo         y el grato aroma de Las Varitas elevándose al cielo…
        Sin darme cuenta cabal de la importancia de aquella rolaza para la península sudcaliforniana, visité el oasis Todos Santos, pueblo mágico donde vive mi maestro el musicazo paceño Daniel Tuchmann (“Vas a querer”, “El rock del Yiggo”, “La última neurona”), uno de los mejores requintistas del mundo; juntos visitamos con la oficiosa Audrey Schmilcker el restaurado Hotel California (!) que acababa de reabrir servicios. Tuchmann y los dueños juran que ahí pernoctaron Frey y Henley cierta noche con una chica medio diablilla, y así fue que se inspiraron para escribir la alucinante historia del “Hotel California”. Los propietarios pusieron un bar de rock en ese sitio mítico de Todos Santos donde venden camisetas, gorras, llaveros, pegotes y cuanta chuchería pueden, para publicitar el “Hotel California” como el paradero exótico donde los Eagles fueron tentados por besos satánicos con olor a colitas de una sirena sudcaliforniana (quien acaso le transó perlas al pirata Drake y a John Steinbeck). Para mala leche de la leyenda The Eagles, Henley ha negado siempre haber visitado Todos Santos, y menos pasar ni una hora en el ilustre Hotel California, pero de nada sirve: el mito de tanto repetirse se ha vuelto verdad. Hacia 2005 volví a interesarme por Eagles, al aparecer sus DVDs blu-ray de adiós al rock The Eagles Farewell One Live From Melbourne Tour, trabajo de madurez excelente, muy finolis armengolis. Luego, en 2013, compré la Historia de una banda americana:The Eagles en tres partes y cuatro horas, e igual, la joya antológica me pareció muy interesante. Aquí terminamos recomendando esta querida banda de pop rock que el lunes 18 perdió a uno de sus fundadores: Glenn Frey, guitarrista, teclados, bajista, cantante y ganador de seis premios Grammy, quien nos obsequió la maravillosa “Hotel California”.

Comentarios