México, D F, 4 de octubre (apro)- En el Palacio de Bellas Artes se celebran cien años desde que fue colocada la primera piedra y 70 de su inauguración Bajo el título “Los Arquitectos de Bellas Artes: Adamo Boari y Federico Mariscal”, a partir del jueves 30 se enseña a los visitantes a conocer el proceso de construcción y los resultados, a través de planos originales y fotografías Bajo la curaduría del arquitecto mexicano Víctor Jiménez, la exposición se divide en dos grandes secciones: “El espacio como protagonista: Adamo Boari” y “Fotografías del italiano Nicola Lorusso” En la primera se aprecian los planos originales en tela de Boari, una vitrina de madera y un conjunto de fotografías originales tomadas por Guillemo Kahlo, así como varios fotógrafos más También una serie muy interesante que fue donada por Francisco Mancilla al archivo de la Dirección de Arquitectura del INBA, a cargo de Xavier Guzmán Esta primera sección logra ofrecer las referencias arquitectónicas que impulsaron a Boari a realizar este proyecto, como la Ópera de París, de Charles Garnier, donde destaca la escalera y el hall Sobresalen también todos los referentes decorativos de la época como fue el art noveau La segunda corresponde a las 54 fotografías de 40 x 50 centímetros, en blanco/negro y a color captadas en 2004 por el italiano Lorusso, quien, además de realizar el trabajo documental, aporta su gran experiencia como fotógrafo de importantes obras de arte En esta sección también se exhiben “El espacio configurado: Federico Mariscal”, donde se muestra cómo este arquitecto dirigió la terminación de todo el edificio y las cúpulas, decorado de interiores, eliminación de las cubiertas con vitrales, así como la creación del museo, planos originales y selección de fotografías de la época, también del archivo donado por Mancilla Vale la pena visitar esta exposición que ofrece no solamente un recorrido retrospectivo, sino una visión actual de este importante recinto considerado patrimonio nacional Rostros Mayas: Linaje y poder Diez de las veinte máscaras funerarias mayas de jade son exhibidas en el Museo Nacional de Antropología, que permite tener una visión sobre la vida de los antiguos gobernantes y su interacción en los ámbitos político social y económico, y de culto divino de esta gran civilización También se aprecia el ajuar funerario del gobernante palencano Pakal, integrado por collares, anillos, pendientes y orejeras, entre otros objetos Así como una pieza policroma que conforma una ofrenda encontrada recientemente en Becán, Campeche La exhibición posee el interés de mostrar cómo el mantenimiento del linaje gobernante incluía la demostración de su riqueza, así como enseñar su importancia por ser esos mandatarios los mediadores con lo divino; de ahí el origen del título kühul ajaw, “sagrado señor”, identificando con el Dios del Maíz, representado como un joven en la plenitud de la vida, que a pesar de alcanzar edades avanzadas, casi siempre se representaba con un aspecto juvenil Estas mascaras son sumamente bellas por su color y por ser de un material escaso El jade tuvo dos significados desde la época olmeca: el simbólico, como representación de la renovación anual de la naturaleza y su vinculación al ciclo agrícola; y el económico, donde su rareza y uso restringido le imprimieron un alto valor La muestra permanecerá abierta al público hasta enero del 2005