mujeres longevas
Murió María Branyas, la persona más longeva del mundo, a los 117 años
El Gerontology Research Group, que valida los datos de las personas que se cree tienen 110 años o más, la nombró como la persona de mayor edad del mundo tras el deceso de la monja francesa, Lucile Randon, el año pasado.MADRID (AP) — Maria Branyas, una española nacida en Estados Unidos y considerada la persona más anciana del mundo con 117 años, ha fallecido, dijo su familia el martes.
"María Branyas nos ha dejado. Se ha ido como ella quería: mientras dormía, tranquila y sin dolor", dijo su familia, en catalán, en un mensaje en la cuenta de Branyas en la red social X.
La Maria Branyas ens ha deixat. Ha mort com ella volia: mentre dormia, tranquil·la i sense dolor.
— Super Àvia Catalana (@MariaBranyas112) August 20, 2024
Fa uns dies ens deia:
“Un dia me n'aniré d'aquí. No tornaré a provar cafè, ni a menjar iogurt, ni a acaronar a la Fada..., deixaré també els meus records, les meves reflexions... ??
El Gerontology Research Group, que valida los datos de las personas que se cree tienen 110 años o más, la nombró como la persona de mayor edad del mundo tras el deceso de la monja francesa, Lucile Randon, el año pasado.
La siguiente persona más anciana nombrada por el Gerontology Research Group es el japonés Tomiko Itooka, que tiene 116 años.
Branyas nació en San Francisco el 4 de marzo de 1907. Tras vivir durante algunos años en Nueva Orleans, donde su padre fundó una revista, la familia regresó a España cuando ella pequeña. Branyas dijo que recordaba haber cruzado el océano Atlántico durante la Primera Guerra Mundial.
Moltes gràcies per les felicitacions. El meu agraïment, de cor, a totes les persones que ahir em vareu manifestar el vostre afecte, respecte i boniques paraules.
“Només amb un somriure que em facis tot passant, ja m’omplo d’alegria i veig el món més gran” (Joana Raspall) pic.twitter.com/upzeZhyeCi — Super Àvia Catalana (@MariaBranyas112) March 5, 2024
Su cuenta en X se llama "Super abuela catalana" e incluye la descripción "Soy vieja, muy vieja, pero no idiota ".
A los 113 años, dio positivo por COVID-19 durante la pandemia, pero no padeció los síntomas graves que se cobraron la vida de decenas de miles de ancianos españoles.
En el momento de su muerte vivía en una residencia de ancianos en la localidad catalana de Olot.
Su familia escribió que, días antes de su muerte, Branyas les dijo: "No sé cuándo, pero muy pronto este largo viaje habrá terminado. La muerte me encontrará gastada por haber vivido tanto, pero quiero que me encuentre sonriente, libre y satisfecha".