Crisis México-Ecuador

Bolivia llama a consultas a su embajadora en Ecuador tras la crisis diplomática con México

El presidente Luis Arce informó que tuvo una conversación telefónica con Andrés Manuel López Obrador para expresarle su "solidaridad por lo sucedido".
lunes, 8 de abril de 2024 · 01:57

MADRID (EUROPA PRESS).- El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció este domingo que ha llamado a consultas a su embajadora en Quito, con motivo de la crisis diplomática entre Ecuador y México tras el asalto a la Embajada mexicana para llevar a cabo la detención del exvicepresidente Jorge Glas.

Arce indicó a través de sus redes sociales que ha tenido una conversación telefónica con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para expresarle su "solidaridad por lo sucedido".

"Le informamos de que hemos convocado a nuestra embajadora en Ecuador para este lunes", ha comunicado.

Además, el Ministerio de Exteriores boliviano convocó a la embajadora de Ecuador en La Paz "para que pueda brindar información sobre lo ocurrido" y reiteró "que la defensa del carácter inviolable de las sedes diplomáticas es un tema de principios, como también de la tradición latinoamericana del asilo, en la cual México es vanguardia".

El mandatario relató que su par mexicano ha destacado durante la conversación el "continuo apoyo que Bolivia ha brindado a México".

"Esperamos que las reuniones convocadas por organismos multilaterales tomen decisiones que impidan que se repitan estos acontecimientos en el futuro", agregó.

Por último, concluyó que, "como países hermanos", se mantienen "unidos" y fortalecerán su diplomacia "en beneficio de la integración y convivencia".

Policías de Ecuador entraron por la fuerza en la madrugada del sábado en la legación diplomática mexicana y se llevaron detenido al que fuera vicepresidente con Rafael Correa durante diez años, que recientemente había recibido asilo político por persecución y acoso.

Las autoridades habían ordenado su detención para prestar declaración ante la Fiscalía por el caso de posible malversación de caudales públicos en la reconstrucción de la provincia de Manabí tras el terremoto de 2016, que dejó más de 670 muertos.

 

 

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