Nobel de la Paz
La Nobel de la Paz Narges Mohammadi denuncia desde prisión "guerra a gran escala contra mujeres" en Irán
La destacada activista llamó a la población a lograr que las autoridades den marcha atrás en sus medidas restrictivas.MADRID, (EUROPA PRESS) - La destacada activista iraní Narges Mohammadi, galardonada en 2023 con el Premio Nobel de la Paz y encarcelada en Irán, denunció una "guerra a gran escala contra las mujeres" y llamó a la población a "levantarse" para hacer frente a la situación y lograr que las autoridades den marcha atrás en sus medidas restrictivas.
"Durante años hemos visto a numerosas mujeres sufrir ataques, abusos y agresiones a manos de agentes gubernamentales. Sin embargo, la República Islámica ha tomado a día de hoy las calles no desde una posición de fuerza, sino desde una de desesperación, para lanzar una guerra total contra todas las mujeres", ha dicho en un mensaje de audio difundido por su familia.
"O ponemos fin a esta guerra incansable perdiendo nuestras vidas o el pueblo de Irán y de todo el mundo se alza para ayudarnos a detener esta guerra (...) y forzar a la República Islámica a dar marcha atrás", ha señalado Mohammadi, quien ha pedido a "artistas, intelectuales, trabajadores, profesores y estudiantes, en el país y en el extranjero, que protesten contra esta guerra contra las mujeres".
Así, reclamó a la población "del mundo" que "detengan esta cruel guerra que representa la fea y horrible cara del apartheid de género en Irán" y ha ensalzado la residente de las mujeres iraníes, sometidas a "ataques y violaciones" por parte de la "implacable República Islámica" para intentar "forzar su retirada".
"Queridas. No subestiméis el poder de compartir vuestras experiencias. Esto expondrá y derribará al gobierno misógino. Larga vida a la resistencia. Larga vida a la libertad. Larga vida a las indomables y valientes mujeres de Irán", ha señalado Mohammadi, según el citado mensaje, compartido por su familia a través de su cuenta en Instagram.
Mohammadi, de 51 años, se ha pasado la mayor parte de los últimos 20 años de su vida en prisión y ha sido condenada hasta en cinco ocasiones hasta acumular una pena total de 31 años de cárcel. A lo largo de toda su vida de activismo, ha fundado asociaciones por los derechos de las mujeres y escrito libros y artículos para denunciar especialmente los abusos de los que son objeto, en particular en las cárceles del país.
La última sentencia contra la activista le añadió diez años y ocho meses de prisión, así como 154 latigazos, por la comisión de "delitos relacionados con la seguridad nacional y propaganda contra el Estado" en lo que organismos humanitarios internacionales denuncian como una condena relacionada por su activismo.