Narcotráfico
Expresidente hondureño Juan Orlando Hernández se defiende en juicio por narcotráfico de NY
El exmandatario subió al banquillo de los testigos el martes durante su juicio en Nueva York, y rechazó que se haya asociado con narcotraficantes para protegerlos a cambio de millones de dólares en sobornos.NUEVA YORK (AP) — El expresidente hondureño Juan Orlando Hernández subió al banquillo de los testigos el martes durante su juicio en Nueva York, y rechazó que se haya asociado con narcotraficantes para protegerlos a cambio de millones de dólares en sobornos.
Su testimonio en una corte federal de Manhattan se produjo tras varios días de declaraciones de narcotraficantes que esperan conseguir algo de clemencia para sus largas sentencias en prisión a cambio de su cooperación en el caso contra el exmandatario hondureño. Los narcotraficantes afirmaron que Orlando Hernández protegió el flujo de drogas a cambio de millones de dólares que le ayudaron a impulsar su ascenso al poder.
Pero Hernández dijo lo opuesto, y declaró que trabajó en contra de los intereses de los narcotraficantes porque le hicieron mucho daño a su país.
Los fiscales señalaron que Hernández, que fungió como presidente de 2014 a 2022, utilizó a las fuerzas militares y a la policía de la nación centroamericana para ayudar a los narcotraficantes a mover drogas a través del país rumbo a Estados Unidos.
En Estados Unidos era visto a menudo como benéfico para los intereses estadounidenses en la región, tanto por gobiernos demócratas como por republicanos.
Hernández negó haber ayudado a los narcotraficantes o haber aceptado sobornos, y se describió como un activista contra el narcotráfico que hizo todo lo que pudo para ayudar a Estados Unidos en su búsqueda de narcotraficantes, incluida la extradición de más de una veintena de individuos.
Un abogado de la defensa preguntó a Hernández si alguna vez aceptó sobornos u ofreció protección a varios cárteles de la droga o a narcotraficantes que han sido mencionados en diversas ocasiones durante el juicio que empezó hace dos semanas.
Insistió en que no lo hizo.
Y, respecto a un testigo que afirmó que traficó drogas con valor de decenas de millones de dólares mientras Hernández fungía como alcalde en Honduras, el expresidente afirmó que no le prometió protegerlo de ser procesado si accedía a no postularse a otro periodo como alcalde cuando surgieron reportes de prensa que lo señalaban como traficante de drogas.
Nunca, respondió Hernández.
En un momento, le preguntaron si un cártel quería asesinarlo.
El FBI me advirtió de ello, contestó.
En el contrainterrogatorio, un fiscal cuestionó a Hernández por unas fotografías, incluida una en la que se ve el brazo de un conocido narcotraficante alrededor de él durante el Mundial de fútbol de 2010.
Durante el interrogatorio, Hernández señaló que las imágenes probablemente eran falsas y rechazó haber conocido al hombre en la Copa del Mundo.
Sobre otra imagen, el fiscal le preguntó: "¿La reunión representada en la fotografía ocurrió?".
Hernández respondió que no estaba seguro.
El expresidente también dijo que los narcotraficantes habían dado dinero a todos los partidos políticos de Honduras, pero no a él.
El fiscal se burló y le preguntó si en serio estaba diciendo que era "el único político honesto de Honduras".
Se sostuvo una objeción por el juez y Hernández no tuvo que contestar.
El hermano del expresidente, Juan Antonio "Tony" Hernández, exlegislador hondureño, fue sentenciado a cadena perpetua en 2021 en un tribunal federal de Manhattan tras ser declarado culpable de cargos relacionados con drogas.
Los fiscales señalaron que Tony Hernández obtuvo y distribuyó millones de dólares en sobornos entre 2004 y 2019 de narcotraficantes para los políticos de su país, incluido 1 millón de dólares del conocido capo mexicano Joaquín "El Chapo" Guzmán para Juan Orlando Hernández.
El expresidente fue arrestado en su hogar de Tegucigalpa, la capital hondureña, en febrero de 2022 —tres meses después de dejar el cargo— y fue extraditado a Estados Unidos en abril de ese año.