BRUSELAS (EUROPA PRESS).– La Comisión Europea propuso este viernes una revisión de las normas que regulan la producción y venta de juguetes en la Unión Europea para reforzar su seguridad, con el objetivo de ampliar las sustancias prohibidas a químicos especialmente dañinos para los menores, pero también para aplicar controles más estrictos a los juguetes importados y a los comprados a través de Internet.

"La propuesta favorecerá la igualdad de condiciones para la industria juguetera, especialmente de las pymes, porque eliminará la competencia desleal y mejorará la seguridad de los niños", defendió el comisario de Mercado Interior, el liberal francés Thierry Breton.

El ejecutivo comunitario plantea, por ejemplo, ampliar las reglas que ya prohíben sustancias carcinógenas o las mutágenas para incluir en el veto los disruptores endocrinos y otros elementos químicos que afecten al sistema respiratorio o a un órgano determinado.

Otra medida será la creación de un pasaporte digital para los juguetes que entren en la Unión Europea para trazar su cumplimiento de las reglas comunitarias, de modo que los fabricantes extracomunitarios tengan que presentar un pasaporte digital para cada juguete que introduzca en el mercado comunitario.

Así, se deberá desarrollar un nuevo sistema informático con el que examinar el pasaporte digital de los juguetes cuando lleguen a la frontera exterior de la UE e identificar los envíos que deban someterse a unos controles más rigurosos en las aduanas.

Dentro de cada Estado miembro, los inspectores nacionales seguirán siendo responsables de controlar los juguetes, pero las nuevas reglas permitirán a la Comisión Europea exigir la retirada del mercado de juguetes que sean considerados "problemáticos" porque presente riesgos no previstos en el reglamento