CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Silencioso durante días ante una situación política inestable y potencialmente explosiva en Guatemala, el gobierno mexicano finalmente aplaudió la decisión del Tribunal Supremo Electoral (TSE) del país centroamericano de reconocer los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 25 de junio pasado.

De acuerdo con esa decisión del TSE, la segunda vuelta electoral por la presidencia de Guatemala se realizará el 20 de agosto próximo y en la disputa participarán Sandra Torres, candidata del partido conservador Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), y Bernardo Arévalo, candidato del partido socialdemócrata Semilla.

Desde ayer, la sociedad de Guatemala estaba en vilo ante la posibilidad de una nueva maniobra del jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad, Rafael Curruchiche –un hombre acusado de corrupción en Estados Unidos–, que buscaba suspender la personería jurídica de Semilla e impedir de ese modo su participación en la segunda vuelta electoral, lo que favorecería Sandra Torres, candidata conservadora y exprimera dama del país.

El miércoles 12, el polémico fiscal Curruchiche dijo que la suspensión contra el partido Semilla procedía debido a que presuntamente había falsificado firmas ciudadanas para lograr que se aprobara su participación en el proceso electoral, acusación rechazada por esa organización.

Entre reclamos de la sociedad guatemalteca y la opinión pública internacional ante un aparente intento de golpe de Estado, y minutos después del ataque de la fiscalía contra Semilla, el TSE finalmente reconoció la validez de los resultados de la primera vuelta y determinó que la segunda vuelta se lleve a cabo el 20 de agosto próximo.

Pero el fiscal Curruchiche, nombrado por el presidente Alejandro Giammattei, no se detuvo ahí: vestidos con pasamontañas, sus agentes hallanaron las oficinas del TSE la mañana del jueves 13 para buscar la documentación que el movimiento Semilla presentó, con la finalidad de que la fiscalía obtuviera elementos que posibilitaran la invalidación del registro de Semilla y sacaran a Arévalo de la contienda.

Rompiendo el silencio

Desde el inicio de la crisis política y pese al posible descarrilamiento del proceso electoral en el país centroamericano, gangrenado por décadas de gobierno corruptos y autoritarios, tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador como la Cancillería, ahora a cargo de Alicia Bárcena Ibarra, permanecieron en silencio durante las últimas tres semanas.

Hoy la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) rompió el silencio. Por medio de su cuenta de Twitter se congratuló por la decisión del TSE de oficializar los resultados de las elecciones y deseó al pueblo y al gobierno de Guatemala “el mayor de los éxitos en el proceso electoral en curso”.